Convertido en los últimos meses en un “altar de muertos”, este jueves fueron hallados en Tlaquepaque, Jalisco, los restos de un hombre en avanzado estado de descomposición.
El hallazgo ocurrió en una fosa de aproximadamente 2.50 metros de largo por 60 centímetros de ancho y más de dos metros de profundidad, localizada en el predio conocido como “El Cerrito”, en la comunidad de San Martín de las Flores de Abajo, del municipio mencionado.
De acuerdo con la fiscalía adscrita al Servicio Médico Forense, en un primer momento se encontró un pie descarnado con un zapato café y un hueso largo.
Posteriormente, añadió, se localizaron pedazos de asientos para vehículos, debajo de los cuales estaba el resto de la osamenta, que hasta ahora no ha podido ser identificada debido a la falta de tejidos blandos.
El pasado 23 de diciembre, dos cadáveres con golpes en varias partes del cuerpo aparecieron sobre el cruce de Periférico y Vidrio en la colonia Arroyo de las Flores de Tlaquepaque.
Un mes antes, en el maletero de una camioneta blanca estacionada en la calle Mata Redonda, casi al cruce con Cerro Azul, en la colonia San Pedrito del mismo municipio, fue encontrado un cuerpo envuelto en cobijas.
Entre otros hechos, el 29 de abril último se localizó el cuerpo de un hombre sin vida –con un disparo en la espalda– en una casa de la colonia López Cotilla, en San Pedro Tlaquepaque.
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