Regularizar el consumo de mariguana, propone Juan Ramón de la Fuente

FUENTE: LA JORNADA
AUTOR: CLAUDIO BAÑUELOS.

"No hay datos que muestren que un país con una politica más prohibitiva tenga menos consumo que un país con una política menos prohibitiva", aseguró el exrector de la UNAM.

Aguascalientes, Ags. El ex rector de la Universidad Nacional Autónoma de México, Juan Ramón de la Fuente, se pronunció por que el gobierno federal estudie aplicar marcos jurídicos acordes a la naturaleza de los mexicanos que puedan servir de contrapesos hacia el crimen organizado y hacia la narcopolítica de una forma inteligente y para lo cual propuso que se regularice el consumo de la mariguana, sin que esto signifique despenalizarla.

El también ex secretario de Salud impartió la conferencia la noche del jueves en la Universidad Autónoma de Aguascalientes, "La Salud Mental en el Contexto de la Globalización" en la cual se refirió al uso de las drogas lo cual dijo en el tema de su distribución "está empezando a tener un impacto en la mortalidad" de los seres humanos.De la Fuente detalló en este sentido que "la distribución y el consumo de drogas no parece guardar una relación directa con el hecho de que algunos países tengan políticas más estrictas que otros, sobre el uso de drogas consideradas como ilegales. No hay datos que muestren que un país con una politica más prohibitiva tenga menos consumo que un país con una política menos prohibitiva".

Acto seguido agregó que "de hecho lo que se observan son variaciones importantes en las tasas de consumo dentro de una misma comunidad con el mismo marco legal, esto ocurre en todo el país. Hay ciertos grupos de mayor consumo y hay ciertas regiones del país de mayor consumo y tenemos el mismo marco regulatorio".

Posteriormente mencionó que "Lo que sí es un hecho es que el consumo de estas drogas llamadas ilícitas cada vez afecta a más personas de ambos sexos y en etapas más tempranas de la vida y las diferencias de genero que eran más significativas en el pasado se acortan año tras año, no hay ya una diferencia marcada entre hombres y mujeres”.

Las comparaciones en el uso de mariguana

“Las comparaciones en el uso de la mariguana por ejemplo en Estados Unidos y los Países Bajos que tienen legislaciones muy distintas sugieren que una política mucho más estricta y punitiva como la de los Estados Unidos no hace grandes diferencias en cuanto al consumo de esta droga, cuando se comparan con lo que ocurre en el marco de políticas un poco más laxas".

Al abundar en el particular, insistió que "el marco jurídico no es el factor determinante no hay datos que muestren que lo sean y se han hecho muchos estudios, por eso es importante que la ciencia nos ayude en el análisis y en la discusión de estos temas porque si nos quedamos en puntos de vista y percepciones que son muy válidos. Pero que no están sustentados en los datos de la ciencia”.

“Y de ahí precisamente se desprenden muchas inicitivas que proponen o desregularizar el uso de la marihuana. Lo que sucedió en Colorado y Washington es algo muy importante y creo que es una tendencia que en los próximos meses o años otros estados y otros países van a revisar el asunto porque el marco jurídico actual no funciona y ya por ejemplo hay avances importantes en Uruguay".

A su vez añadió que en otras naciones como en Colombia y en Guatemala también se analizan ya, por lo que sugirió que "México va a tener que tomar una posición al respecto y ojalá sea una posición informada y sea cuidadosa y bien ponderada porque nos conviene a todos en todo caso lo que no podemos es eludir el hecho.

Más adelante hizo hincapié en que "no hay ninguna información que muestre que hay una correlación directa entre el consumo de mariguana y violencia. A diferencia de lo que ocurre con el alcohol. Con el alcohol sí hay una relación directa ente consumo y violencia de lo que sucede con la mariguana, porque no la hay.

La relación se da entre la compra, el tráfico ilegal y la violencia y esto ha hecho que algunas personas que me merecen mi mayor respeto consideran que sí el problema esta en el tráfico ilegal y no tanto en el consumo, lo que se debe desregularizar es el consumo y tener un marco diferente al tráfico. Es decir que no criminalicemos a los usuarios de mariguana".

Puntualizó también que "no necesariamente quiere decir que la legalicemos, la diferencia es sutil en este punto, yo me adhiero porque creo que la mayoría de los usuarios de marihuana no son ni criminales ni narcotraficantes.

Al reiterar que se debe tener cuidado porque sí hay riesgo de adicción "Pero el hecho de que alguien consuma mariguana no lo convierte en un delincuente y al criminalizarlos el sistema lo que hace es que los esta arrojando al mundo de la delincuencia.

Y la gran base social y del narcotráfico es precisamente ese sector de usuarios casi todos jóvenes que al no tener otra posibilidad recurren al narcomenudeo y a la compra ilícita e ilegal".

El ex vicepresidente de la Organización Mundial de la Salud, precisó que "No se trata de pensar que la despenalización va a ser la vara mágica que va acabar con todos los problemas, yo no lo creo, hacerlo sería un grave error".

De la Fuente consideró que se puede tomar de algunos países europeos que lejos de despenalizar lo que han ido haciendo es regular el consumo de mariguana y separarla de otras drogas ilegales que son mucho más peligrosas, porque aquí resulta ahora que tenemos como drogas legales al tabaco y el alcohol.

Explicó también que el tabaco es 40 veces más adictivo que la mariguana y esta regulado. Y en este punto anotó que "no estoy bajo ninguna circunstancia, para que no haya dudas. No estoy diciendo que hay que fumar mariguana, fumar tabaco y beber en exceso. Lo que estoy diciendo es tener un marco regulatorio que permita que estas sustancias que son nocivas a la salud en grados diversos tengan un esquema que nos permita salirnos de las garras del crimen organizado".

Ese es el gran reto; no es sencillo, no hay soluciones simplonas. Ojalá que nunca tengamos en este país un referendum que diga "estas o no de acuerdo con la despenalización de la mariguana, porque eso es reducirlo a una simplonería que no nos lleva a ningún lado y eso lo que único que nos lleva es a dividir a la sociedad porque estos temas obviamente así son, y no le vamos a ayudar al gobierno a tomar una decisión sensata.

Lo que se requiere dijo es estudiar opciones de marcos regulatorios algunos de ellos graduales y lo escencial es separar el consumo de la producción y la venta. Porque hasta ahora la estrategia es atacar a los consumidores y sí se sigue en esta tendencia es perder de vista el resto de la cadena.

Reiteró que la cannabis causa daños, propicia problemas de conducta, genera cierto poder adictivo, pero lo que sí parece ser es que las consecuencias de su prohibición absoluta son mucho más adversas porque indican que la única forma de adquirirla sea precisamente en el mercado negro a través del contrabando, la extorsión el chantaje, del propio ilícito es decir es que no se dejan opciones.

Acotó que lo más interesante es que van surgiendo ciertos modelos intermedios que permiten la posesión de cantidades graduales acotadas, sin que esto signifique la venta o producción indiscriminada.

Finalmente apuntó que pare frenar el avance de la delincuencia organizada hay que utilizar "contrapesos inteligentes que de alguna manera modifiquen los equilibrios de los poderosos resortes que agobian al país con la violencia".