De acuerdo con un estudio de la Red por los Derechos de la Infancia en México, el año pasado se registraron 289 muertes de jóvenes vinculados con el narcotráfico, en particular en los estados de Chihuahua, Nuevo León y Guerrero. Esta cifra representa el 40% de las muertes contadas a partir de 2010, cuando la organización inició su propio censo.
Según el reporte, junio y agosto fueron los meses más violentos en 2012 para los adolescentes ligados al narco; en 2011, fue febrero y en 2010, julio.
El promedio mensual de muertes en 2010 fue de 15, incrementó a 20 en 2011 y en 2012 se ubicó en 24.
Los más afectados durante 2012 fueron jóvenes entre los 15 y 17 años de edad. En 2011, los más afectados fueron los adolescentes de 16 años.
En el lapso de 2011 a 2012 el número de muertes entre infantes de 0 a 9 años decreció, según el informe, pero en el mismo lapso el de adolescentes aumentó de manera “bastante notable”.
Asimismo, el estudio muestra que la mayoría de las víctimas son hombres. En 2010, tres de cada 10 asesinados eran mujeres, al año siguiente la proporción bajó a una de cada cuatro y en 2012 volvió a bajar a una de cada cinco.
“Esta situación refleja que el incremento se ha dado principalmente en la población masculina”, subraya el documento.
Y precisa que si bien la ola de violencia ha sido mayor en los estados del Norte, en 2011 el estado de Guerrero ocupó el segundo lugar como la entidad con mayor número de muertes.
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