La investigación que la PGR realiza sobre las causas del estallido en el corporativo de Pemex está abierta a todas las líneas, incluidos el sabotaje y la explosión de gas o de la instalación eléctrica.
Asimismo, agrega el periódico, integrantes del gabinete de seguridad (de los que no revela la identidad) no descartan que se haya tratado de un atentado.
Un empleado del edificio contiguo a aquél donde ocurrió la explosión refirió al diarioReforma que del sótano del B-2 salía mucho humo, pero nada de fuego. Indicó que en el sótano del edificio se encontraba el sistema eléctrico que alimenta al edificio de energía y maquinaria de aire acondicionado, pero no se almacena material inflamable.
Tras el siniestro, ocurrido ayer a las 15:40 horas, la PGR inició las indagatorias para determinar las causas de la explosión y envió a más de 15 peritos que trabajarán conjuntamente con militares expertos en explosivos.
Esta mañana, el director de Pemex, Emilio Lozoya Austin, dijo en breve entrevista en el programa Primero Noticias que aunque parece que fue un accidente, “todas las líneas de investigación están abiertas, no vamos a descartar ninguna”.
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