El lunes, la aerolínea anunció que el banco reduciría su participación accionaria en la empresa para quedar en 16.11%, 32.8% menos de lo que tenía en 2007 cuando se privatizó Aeroméxico.
En 2007, cuando el gobierno federal privatizó Aeroméxico, Banamex y un grupo de empresariosadquirieron la aerolínea por 249 millones 102 mil dólares. Con esta transacción, 15 hombres de negocios se convirtieron en accionistas de la aerolínea, quienes tendrán el 51% del control sobre la misma, mientras que el grupo Citibank-Banamex sería dueño del 49 por ciento restante.
Con la transacción del martes en la que Banamex vendió el 20.19 por ciento de su paquete accionario al presidente del Consejo de Administración de Grupo Lala, la institución financiera continúa con un plan de desincorporación de activos para sortear la crisis por la que atraviesan distintas instituciones financieras a raíz de la crisis de 2009.
“Banamex sigue en la línea de desinversión en activos no estratégicos, para concentrarse más en el negocio de la banca, no obstante(…), mantenemos un porcentaje importante”, dijo en entrevista al diario Reforma Paulo Carreño, director de Comunicaciones del banco.
Des el punto de vista de analistas, como Raúl Félix, experto en temas de macroeconomía, “no tiene mucho sentido que un banco se vuelva el socio principal de una aerolínea, a menos que lo vea como un negocio a largo plazo”.
Con la transacción, la propiedad de la aerolínea se queda dividida de la siguiente forma: 61.96% queda en manos de un grupo de empresarios, liderados por Tricio Haro, 16.11% será de Banamex , el 17.74% restante permanece en la bolsa de valores y el 4.7% es propiedad de Delta Airlines.
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