AUTOR: Andrea Becerril y Víctor Ballinas.
La votación final fue de 83 votos a favor, 17 en contra, 7 abstenciones, estas últimas de senadores perredistas, toda vez que la bancada sufragó dividida.
El priísta David Penchyna, presidente de la comisión de energía, refutó las acusaciones y cuestionamientos formuladas por el petista Manuel Bartlett y por la senadora del PRD Dolores Padierna, quienes insistieron en que esa estrategia es el punto de partida para entregar el petróleo y la electricidad a empresas transnacionales.
El priísta sostuvo que “la privatización sólo existe en la cabeza de algunos”, e insistió en que se trata sólo de una estrategia, no de una reforma energética. Argumentó sin embargo que se requieren más de cien mil millones de pesos, que es un tercio del presupuesto para solventar las necesidades de inversión en el sector energético.
Antes, el también senador del PRI y ex gobernador de Tamaulipas, Manuel Cavazos, le respondió a Bartlett y sostuvo que “en el diccionario del PRI no existe la palabra privatización, sino la palabra modernización”. Dejó claro que para qué va a invertir Pemex sus escasos recursos en áreas que a penas tienen una rentabilidad del 20 por ciento, si hay otras empresas para las que son atractivas.
Padierna respondió a Penchyna que no es que la privatización esté en la mente de algunos y leyó varios apartados del documento en los que se alude a la necesidad fundamental de que participen particulares en Pemex y CFE. “Así que no venga aquí a engañar”, recalcó.
El PAN expuso desde un principio que votaría a favor, aunque reprochó que en la estrategia no se hayan reconocido los avances logrados en materia energética durante los dos gobiernos del PAN.
El senador panista, Jorge Luis Lavalle, recalcó que ellos no van a actuar de forma mezquina ni por cálculos electorales, y agregó que el sector se habría modernizado mucho antes , “si quienes hoy proponen hubieran aceptado las reformas necesarias”.
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