Gregorio Guerrero Pozas, contralor del Instituto Federal Electoral, defendió la investigación sobre presuntas irregularidades en la compra de un inmueble para el IFE, en 2009; adelantó que evalúa presentar una denuncia de hechos ante la PGR.
En Noticias MVS primera emisión, Guerrero enlistó las irregularidades que considera más graves y que, aseguró, no fueron analizadas por los consejeros durante la sesión del pleno.
Adelantó que se encuentra evaluando si presenta una denuncia de hechos ante la PGR, a la vez que defendió que los funcionarios de la contraloría son de reconocida experiencia,“ninguno es un improvisado”. Añadió que la investigación duró poco más de 2 años y las pruebas que la soportan son muy sólidas.
Sentencio que: “Todo esto no se puede desvirtuar por revisiones ligeras y sesgadas de los miembros del consejo, de poco menos de 2 semanas”.
Estas son las consideraciones que Guerrero Pozas argumentó sobre la investigación dela compra de un inmueble para el IFE en Acoxpa, en el Distrito Federal en 2009, con presuntas irregularidades:
No se dice que había adeudo de casi 5 millones de pesos de predial y que los pagaría el IFE con recursos públicos.
Indebidamente, se pagaron 12 millones de pesos de impuestos que no le correspondían pagar al órgano electoral.
El entonces director de la DEA firmó anticipadamente el contrato de compra-venta sin tener facultades para ello y sin autorización de la Junta General Ejecutiva”.
La normatividad interna del IFE establece que no se deben comprar inmuebles con antigüedad mayor a 30 años, en el momento de la compra el edificio tenía poco más 32.
En el momento de la compra, no estaba autorizada por la Junta General Ejecutiva la suficiencia presupuestal y esto se regulariza hasta el año fiscal siguiente.
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