Alfonso Cortés, quien ayer se convirtió en el segundo arzobispo de León, en sustitución de José Guadalupe Martín Rábago, también se transportó en una camioneta oficial del gobierno estatal.
El periódico Reforma publica que el jet en el que viajó Cortés tiene la matrícula N801LM. El arzobispo viajó en compañía de su madre y el nuncio apostólico Christophe Pierre.
Al mismo tiempo, Elías Villegas, dirigente de la organización de ultraderecha El Yunque, ayudó a financiar la renta del Polifórum, donde los católicos recibieron al nuevo arzobispo.
El gobernador de Guanajuato, Miguel Márquez, le entregó al arzobispo un presente, “es algo personal, un regalo de la familia”.
En su mensaje, al arzobispo declaró: “Yo quiero hacer dos cosas: servir y ser un factor de unidad en esta arquidiócesis”.
Acompañaron a Cortés el presidente del Consejo Episcopal Latinoamericano, Carlos Aguiar Retes; el arzobispo Emérito, José Guadalupe Martín Rábago; así como 30 obispos y cerca de ocho mil feligreses.
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