AUTOR: JORGE ARMANDO HERNÁNDEZ.
Monterrey, N.L.- En un emotivo evento realizado en la sede del Sindicato de Telefonistas de la República Mexicana en Monterrey, N.L., ante representantes de organizaciones sociales, sindicales y políticas, se solicitó de manera reiterada a Martín Esparza, secretario general del Sindicato Mexicano de Electricistas (SME) convocar a todas las organizaciones posibles del país a emprender la embestida que ponga alto a la política económica neoliberal que mantiene en la explotación a la clase trabajadora y en la miseria a la mayoría del pueblo mexicano.
En el marco de la caravana “Por el derecho y la justicia del trabajador” que ha recorrido distintos Estados y ciudades del país y que se dirige a Nuevo Laredo, Tamaulipas, quienes tomaron la palabra en este encuentro pidieron al líder electricistas que se establezca una agenda para emprender acciones inmediatas ante las llamadas “reformas estructurales” y demás políticas que siguen golpeando a los sectores más desprotegidos del país.
Un participante espontáneo, jubilado de Teléfonos de México, de nombre Antonio Carrillo Balderas, sostuvo que es lamentable que la fecha del primero de mayo prácticamente se esté olvidando. Visiblemente conmovido y con la voz entre cortada dijo al líder del SME: “¡Martín, por favor, cuídame esta fecha si me muero!”.
Por otra parte, Blanca Guzmán, jubilada del IMSS y representante de trabajadores de Fundidora Monterrey narró la problemática por la que han atravesado durante 27 años de lucha desde que el Parque Fundidora fue cerrado el 10 de mayo de 1986.
José Antonio Altamirano Ojeda, de la sección 22 de Oaxaca de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) fue enfático al señalar a todos los presentes: “tenemos todos, como pueblo, que defender los derechos de los trabajadores del SME para que les devuelvan el empleo. Esa lucha es nuestra y tenemos que exigir su reinstalación inmediata”.
Al cerrar el evento, Martín Esparza, mencionó que en el norte del país abundan los ejemplos de la entrega del patrimonio nacional con las plantas de generación de electricidad que ya están en manos extranjeras. Agradeció todas las adhesiones al sindicato y anunció que una vez que se entregue la denuncia contra el gobierno mexicano ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), regresará para continuar visitando distintos Estados de la república, organizar la lucha en contra de este sistema político que sólo beneficia a unos cuantos, y también, para constituir una nueva central obrera que en realidad defienda los derechos de los trabajadores.
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