Por su parte los desarrolladores recurrieron a la autoridad judicial para definir si procede o no el permiso antes otorgado.
El alcalde Julián Ricalde Magaña detalló que no se les libera la licencia de construcción, debido a que el proyecto está sobredensificado y que no corresponde al que le presentaron a la Comuna y el que tiene el gobierno de Quintana Roo, entre otros.
Indicó que el camino que tomaron los desarrolladores de llevar los trámites a otra instancia, confirma que empieza una “escalada judicial” para tratar de revertir la negativa de otorgarles los permisos municipales.
“El trámite lo lleva a otro tiempo, a otros meses, de todos modos iba a ser así, yo no estaba esperando que fuera de otra manera”, subrayó.
Reconoció que le causó sorpresa el trámite que iniciaron los desarrolladores, porque tienen un compromiso público de sus representantes de llevar a cabo un proceso transparente, inédito en el municipio, pero que ya rompieron al iniciar este trámite.
“Están errando el camino, se van a la base interpretativa muy literal, no consideran la parte funcional de la ley en materia de administración pública, los tiempos son diferentes”, manifestó Ricalde Magaña.
“Es una estrategia jurídica que van a intentar, en mi opinión, termina de dejar mal parados a los promoventes y a lo que se ha manifestado en el tema de la opacidad con la que han actuado”, agregó.
Consideró que ahora la estrategia será pasar a lo contencioso administrativo, pero de entrada, subrayó, esta nueva estrategia no los deja bien parados.
La víspera, los desarrolladores del proyecto Dragon Mart dieron a conocer que ante la falta de respuesta de las autoridades a la solicitud de licencia de construcción de su proyecto en Cancún, recurrieron a la autoridad judicial para que defina si procede o no el otorgamiento de este permiso.
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