AUTOR: ALBERTO OSORIO.
Durante la administración de Emilio González Márquez, el dueño del grupo Rodena, José María Andrés Villalobos, vicepresidente de la Confederación de Cámaras Nacionales de Comercio (Concanaco), contó con el apoyo del gobierno panista para edificar un exclusivo desarrollo turístico en esa zona.
El 4 de agosto de 2010 elementos de la Secretaría de Seguridad Pública desalojaron de manera violenta a decenas de comerciantes, pescadores y prestadores de servicio que desempeñaban sus labores en ese destino turístico.
En aquella ocasión, los policías atacaron con balas de goma a habitantes del ejido El Rebalse, que se encuentra a menos de un kilómetro de distancia de la playa, quienes se inconformaron con la medida.
El pasado domingo 2, al filo de las 10 de la mañana, elementos de la Fiscalía General del estado (FGE) y personal de la Secretaría General de Gobierno liberaron la playa “tomada” hace casi tres años por el vicepresidente de la Concanaco.
“Ahí procedieron a liberar el ingreso de la carretera número 200, Barra de Navidad-Puerto Vallarta, en el kilómetro 7 del ramal Tenacatita, que da acceso a la playa”, puntualizó el gobierno de Aristóteles Sandoval en un comunicado enviado a los medios de comunicación.
“Los agentes le notificaron al personal de seguridad que se encontraba en la garita de acceso que a partir de ese momento se liberaba el acceso carretero, con independencia de los procedimientos legales que existen”.
A las 15:30 horas el ingreso y el derecho de paso quedaron liberados, de acuerdo con el texto.
En la acción participaron agentes de la FGE bajo el mando de Alejandro Solorio; de la Dirección de Asuntos Agrarios de la Secretaría General de Gobierno, a cargo de Vladimir Avilés, del Ministerio Público y personal del Ayuntamiento de La Huerta, encabezados por el alcalde Jesús Julián De Niz Sánchez, quien firmó un documento-compromiso en el que se establece que no otorgará ningún tipo de licencia, autorización o permiso en la zona federal marítima terrestre.
Según un informe de antecedentes proporcionados por el gobierno de Jalisco, desde el 4 de agosto de 2010 y a consecuencia de una concesión otorgada por el gobierno federal a la inmobiliaria Rodenas, en 1992, los restauranteros, pescadores, ejidatarios y moradores fueron desalojados de la playa.
Desde entonces el acceso a la playa estuvo restringido y era controlado por agentes de seguridad. En 2012 el gobierno federal informó a Rodenas que la concesión había vencido y no le sería renovada.
El 10 de abril de ese mismo año la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) otorgó al Ayuntamiento de La Huerta el acuerdo de destino para la utilización de playa pública, uso recreativo y construcción de malecón.
El pasado 30 de mayo la alcaldía solicitó al gobierno del estado su intervención para liberar el acceso de la playa, bajo el compromiso de mantener y respetar el destino que le otorgó la Semarnat.
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