La ex pareja del ministro en retiro afirmó que si hubiera estado interesado en no afectar a ella o a sus hijos no habría apelado su libertad, tras ser acusada por el delito de fraude.
En entrevista con Noticias MVS primera emisión, afirmó que si Góngora hubiera estado interesado en no afectar a ella o a sus hijos no lo hubiera hecho un año después.
“Yo creo que no solo es decir ‘quiero’, sino demostrarlo, y hasta ahora no lo ha hecho”, comentó.
Orozco resaltó la falta de interés del ex ministro, ya que sus hijos David y Ulises no han sido rehabilitados en su padecimiento de autismo pese al conocimiento de la enfermedad por su parte y de su defensa.
Después que el pasado 5 de julio, los abogados de Góngora Pimentel aseguraran que su cliente gana solamente 200,000 pesos y no 500,000 como ella asegura, Orozco dijo que su defensa tiene documentación que prueba que al menos gana 250,00 pesos y tiene prestaciones como gastos de hasta 20,000 pesos para alimentación, transporte como chofer, gastos pagados de gasolina y celular, entre otros.
La ex pareja del ministro mencionó que hubo un error por parte del área de recursos humanos de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) pero cuestionó si la información proporcionada es realmente un error o bien es un mecanismo para ayudarlo.
Al ser cuestionada sobre la relación entre sus hijos y su padre, Orozco refirió que la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal (CDHDF) tiene conocimiento delestado de indefensión que viven los niños e incluso de un documento firmado por el propio Góngora donde se habla de la discriminación que ha tenido con ellos, por lo que se preguntó si existe alguna sanción al respecto.
Ana María Orozco comentó que desde que estuvo en prisión, el ex ministro fue una vez a revisar la casa pero no vio ni preguntó por sus hijos.
“No me ha dicho te acompaño a la clínica de rehabilitación o te doy el dinero para llevarlos”, dijo.
La ex pareja de Góngora indicó que más que una llamada, ella espera la presencia física para los niños, pues recordó que antes del diagnóstico de los niños, él los visitaba cada fin de semana pero después del conflicto de pareja, la separación fue definitiva.
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