AUTOR: RICARDO MEJÍA BERDEJA.
El pasado 6 y 7 de julio, el Centro de Estudios Sociales y de Opinión Pública de la Cámara de Diputados (CESOP), realizó un sondeo para conocer la postura de la ciudadanía sobre la posible reforma que busca privatizar Pemex.
Dentro de opiniones divididas se pudo inferir que una gran parte de la población se muestra indiferente respecto a la privatización de la paraestatal. A continuación presentamos algunos argumentos por los que dejar en manos de privados a Petróleos Mexicanos es una medida que nos afecta a todos:
a) Pemex es altamente rentable: las ventas totales de la paraestatal en el 2012 alcanzaron un máximo histórico de 1 billón 647 mil millones de pesos. Las utilidades antes de impuestos, intereses, depreciación y amortización fueron de 1 billón 138 mil millones de pesos, situando a la paraestatal entre las mejores 10 empresas del mundo en este renglón.
b) Enorme carga fiscal: a lo largo de las últimas décadas, Pemex ha servido como salvavidas para la pésima recaudación del país, representando entre el 35 y 40% de lo que se recaudaen México.
En el 2012, la paraestatal pagó un monto total de 901 mil 876millones de pesos, cifra 3.3% superior a la cantidad del 2011. Esto representó el 55% de sus ventas totales y el 99% de la utilidad de operación.
En contraste, el Impuesto Sobre la Renta (ISR) que pagaron todas las empresas del país juntas fue de sólo 288 mil 360mdp, es decir, menos de la tercera parte de lo que pagó Pemex.
La carga tributaria que soportó Pemex la coloca en el primer lugar de impuestos que paga una empresa petrolera en el mundo, a diferencia del 30% de ISR sobre ingresos netos que paga cualquier empresa de la iniciativa privada.
c) Por lo anterior, TODOS nos perjudicaríamos si la empresa se privatizara. Esto se debe a que entre más se privatice la paraestatal, más subirán los impuestos y más disminuirán los servicios públicos y el gasto social.
Que Pemex pague más del triple de lo que pagan de ISR todas las empresas privadas del país; se debe en gran medida a que existen numerosos mecanismos que, en contubernio con funcionarios del SAT, permiten a los grandes consorcios no pagar impuestos. Si Petróleos Mexicanos se vuelve privada, seguramente aplicará las mismas estrategias para no pagar impuestos.
d) En contraste a la privatización, si Pemex se manejara de manera eficiente, como el resto de empresas petroleras públicas exitosas en el mundo privilegiaría el contenido nacional. Lo anterior nos podría beneficiar a todos, ya que si llegáramos a los niveles de Brasil, de 80%, similares a los que una vez tuvimos, se podrían ahorrar 15,000 millones de dólares al año de importaciones y generar muchos miles de empleos bien pagados para obreros, técnicos e ingenieros mexicanos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario