La guerra contra el narcotráfico: una política que impuso el abuso y la arbitrariedad

FUENTE: REVOLUCIÓN TRES PUNTO CERO.
AUTOR: OSWALDO VARILLAS.

El director de la División de las Américas de Human Rights Watch y ex integrante de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos en la Organización de Estados Americanos (OEA.) José Miguel Vivanco, hace presente su postura respecto a los estragos que ocasionó la guerra frontal contra el crimen organizado que inició el ex presidente Felipe Calderón.

El diplomatico chileno participa en el Foro Tricameral “De la prohibición a la regulación: nuevos enfoques en políticas de drogas” que las cámaras de Senadores, de diputados y la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF) realizan este jueves y viernes.

José Miguel Vivanco afirma que a diferencia de países como Argentina, Chile, Uruguay e incluso Perú, México se encuentra en una crítica situación de retroceso en relación a las violaciones de derechos humanos, ya que durante el sexenio anterior se cometieron abusos nunca antes conocidos en México, acompañados de un índice de impunidad creciente.

Como fatídico ejemplo de esta condición social mencionó la existencia de 5 mil 500 investigaciones abiertas en la jurisdicción penal militar por presuntos abusos de los efectivos durante la guerra contra el narcotráfico de las cuales solo cuatro tuvieron “resolución”.

Uno de los pronunciamientos principales del experto en América Latina fue a favor de la descriminalización del consumo de la mariguana y de la aplicación y fomento de campañas de prevensión y atención a adicciones.

Para José Miguel Vivanco parte de las desastrozas consecuencias de implementar una política de violencia frontal en contra del narcotráfico en México implicó un descuido en las investigaciones judiciales necesarias para dar seguimiento y resolución suficiente a las denuncias dejando a la ciudadanía a merced de una política que impuso el abuso y la arbitrariedad.

La presencia de Vivanco en el Foro Tricameral supone un gran avance en la reflexión de un tema tan delicado y fundamental para el país como es el de la regulación en políticas de drogas. Su condición de crítico infatigable de las violaciones de derechos humanos durante la guerra contra el narcotráfico en el gobierno de Felipe calderón suman un elemento imprescindible en el camino que perfile una pronta resolución sobre la problemática conjunta que implican la regulación de las drogas, narcotráfico y derechos humanos.