FUENTE: REVOLUCIÓN TRES PUNTO CERO.
AUTOR: OSWALDO VARILLAS.
Los diputados de las fracciones parlamentarias de los partidos de la Revolución Democrática (PRD) y del Trabajo (PT) en la Asamblea Legislativa del Distrito Federal se dieron cita en las cercanías del sitiado Zócalo capitalino, para presentar e instalar la mesa de recopilación de firmas en orden a la reactivación de una consulta popular en defensa del petróleo titulada “El petróleo es nuestro”.
A través de esta campaña, los legisladores del PRD y PT manifiestan su oposición a la iniciativa, presentada por los partidos Revolucionario Institucional (PRI) y Acción Nacional (PAN), de reformar los artículos 27 y 28 de la Constitución para, en palabras de la diputada perredista Ariadna Montiel, “darle entrada al capital privado”.
La legisladora perredista Ariadna Montiel señala que “la recopilación de firmas se ha planteado como una estrategia política para revertir dicho intento de privatización. El objetivo es recopilar un millón seiscientas mil firmas de ciudadanos para forzar al Gobierno Federal a que realice una consulta nacional para que sean los ciudadanos mismos los que decidan el futuro del petróleo y la electricidad”.
Para los diputados perredistas es sumamente importante la recopilación de firmas, ya que, aseguran, es necesario que se consulte a la gente en materia de los cambios constitucionales que se requieren en el tema petrolero y para lograrlo el Gobierno Federal tiene la responsabilidad de organizar una consulta popular ciudadana.
Por su parte, el diputado perredista Adrián Michel menciona que la Constitución ya establece la posibilidad de que se hagan consultas obligatorias en este tipo de materias y la apertura para que los privados participen en la renta petrolera plantea una discusión que debe incluir, necesariamente, a la ciudadanía.
La invitación a que la ciudadanía se sume a la recopilación de firmas fue una de las intenciones fundamentales de la presentación de la campaña que tiene ya su propia página en internet, la cual reivindica también la necesidad de informar sobre las críticas consecuencias que implica reformar los artículos 27 y 28 constitucionales.
Durante la jornada informativa se recalcó la insuficiencia de las explicaciones que la propuesta del Gobierno Federal contiene en lo que se refiere a la participación de capital privado así como de empresas extranjeras en el ámbito petrolero nacional.
Los legisladores explicaron que la consulta popular, como nueva figura permitida por la Constitución, implica preguntarles su opinión a los ciudadanos sobre ciertos asuntos importantes y de trascendencia para el país; para los diputados del PRD y PT el tema de la privatización de los recursos energéticos es precisamente uno de los temas más importantes en este momento en la agenda pública.
También mencionaron que, según requiere la ley, es necesario juntar el 2 por ciento de la lista nominal de electores para solicitar al Gobierno Federal que se realice la consulta popular; este porcentaje representa alrededor de 1 millón 600 mil ciudadanos. Indicaron que ya se están concentrando en el Senado de la República las firmas recabadas en todos los estados del país.
La campaña de recopilación de firmas tiene previsto que antes de que acabe el mes de octubre se consiga, con el esfuerzo conjunto de las diferentes fuerzas de izquierda del país, obligar a que se realice una consulta popular, ya que se prevé rebasar el número mínimo requerido por el Instituto Federal Electoral para exigir la consulta popular.
Finalmente, los legisladores hicieron extensiva a la ciudadanía la invitación para acercarse a la mesa de recopilación para firmar e informarse. La mesa estará todos los días del mes de octubre de 9 de la mañana a 6 de la tarde en la calle Madero del Centro Histórico de la capital, e invitaron a que este ejercicio de recopilación sea replicado en los demás Estados del país.
A pesar del secuestro y sitio que sufre el Zócalo de la capital se pudo vislumbrar una contundente afirmación: Sí a la consulta popular ¡firma ya! El petróleo es de todos, que nos pregunten a todos.
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