Sin cédula ni currículum del encargado, GDF inició restauración de ‘El Caballito’

FUENTE: ARISTEGUI NOTICIAS.

Arturo Javier Marina Othón carece de cédula de restaurador; el Fideicomiso Centro Histórico no entregó la documentación completa para iniciar la reparación de la escultura de Carlos IV.

El responsable de la restauración de la escultura de Carlos IV, El Caballito, Arturo Javier Marina Othón, inició las restauraciones de la obra sin acreditar sucédula profesional de restaurador ni el currículum completo, reveló el dictamen del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH).

“Los documentos presentados por el Fideicomiso del Centro Histórico de la Ciudad de México y por el Sr. Arturo Javier Marina Othón, mediante los cuales se pretendió obtener solicitud de autorización por parte del INAH de manera extemporánea están incompletos“, asegura el dictamen de la dependencia.

El INAH no recibió ”cédula profesional de restaurador responsable“, además el organismo carece del currículum completo del responsable de los trabajos.

El Fideicomiso Centro Histórico, que preside Inti Muñoz, no presentó un diagnóstico previo para justificar la necesidad de restaurar la obra ubicada en la plaza Manuel Tolsá, en la calle Tacuba.

“(Javier Marina Othón) planteó métodos y materiales de intervención sumamente agresivos que afectaron la integridad del monumento histórico, y su ejecución no autorizada generó daños irreversibles”, sostuvo el organismo.

El organismo capitalino inició un proceso de restauración de la escultura, sin previa autorización del INAH.

Con deficiencias por altas concentraciones de ácido, la escultura presenta actualmente daños irreversibles en 50 por ciento en la escultura y en el pedestal, según el organismo federal.

A continuación, el fragmento del dictamen que dedica a Arturo Javier Marina Othón:

Los documentos presentados por el Fideicomiso del Centro Histórico de la Ciudad de México y por el Sr. Arturo Javier Marina Othón, mediante los cuales se pretendió obtener solicitud de autorización por parte del INAH de manera extemporánea están incompletos.

• No se presentó cédula profesional de restaurador responsable.
• No cuenta con un curriculum completo del responsable de los trabajos.
• No se presentó un diagnóstico preliminar que justifique las intervenciones realizadas.
• Planteó métodos y materiales de intervención sumamente agresivos que afectaron la integridad del monumento histórico, y su ejecución no autorizada generó daños irreversibles.