AUTOR: ANTONIO JIMÉNEZ.
El pasado sábado, durante la marcha de miles de personas en la Ciudad de México, los manifestantes, al ver bloqueada la ruta que pretendían seguir –del Ángel de la Independencia al Zócalo capitalino- tuvieron que realizar una asamblea para decidir qué hacer ante el cambio de panorama.
En el Hemiciclo a Juárez, lugar donde se llevó a cabo la discusión que duró alrededor de una hora, se decidió que se realizarían diferentes encuentros en la semana como asambleas, reuniones grupales con el fin de impulsar la organización estudiantil, juvenil y popular en la capital.
Y es que el fin de semana pasado, para muchos activistas, grupos estudiantiles y movimientos populares, se desplegó un fenómeno muy importante, ya que la respuesta a las convocatorias de protesta ante el alza del Metro, la Reforma Energética y la ley antimanifestaciones rompió las bajas expectativas.
Para los activistas, es claro que mucha gente está indignada y con ganas de realizar acciones, por lo que ahora buscan una manera de organizar esa indignación, pues consideran que la falta de una organización que trascendiera el momento político fue uno de los grandes errores que en 2012 llevaron a la rápida dispersión del movimiento #YoSoy132.
Por ello, en las reuniones que se están llevando a cabo se discuten las posibles vías organizativas, está a unos cuantos días del éxodo vacacional.
Los activistas saben que es importante el momento coyuntural, el momento de la inmediatez, pero la experiencia también les dice que que es necesario iniciar un trabajo permanente donde se profundice en el modelo y se busquen nuevas alternativas políticas de movilización.
No hay comentarios:
Publicar un comentario