AUTOR: EZEQUIEL FLORES CONTRERAS.
No obstante, autoridades estatales oficialmente reportan a un muerto, a pesar de que la balacera se prolongó durante una hora. Se recogieron más de 90 casquillos de diferente calibre y las versiones de pobladores indican que los pistoleros se llevaron a sus muertos y lesionados.
El enfrentamiento se registró cerca de las 08:00 horas en las inmediaciones de la comunidad de Ayahualulco, cuando un grupo conformado por al menos 30 hombres armados irrumpió a bordo de tres camionetas y fue recibido a balazos por una decena de habitantes.
Enseguida se desató un cruento tiroteo. Los pistoleros se perseguían sobre las polvorosas calles del lugar donde quedaron las huellas de la batalla: manchas de sangre en varios puntos, así como vehículos y viviendas baleadas.
Las autoridades estatales y municipales arribaron al lugar, ubicado a 40 minutos de la cabecera municipal, cerca de las 15:00 horas, es decir seis horas después de ocurrido el enfrentamiento.
En el punto conocido como Samancingo fue encontrado el cadáver de un poblador identificado como Humberto Moreno Valle, al interior de una vivienda habilitada como tienda de abarrotes.
En el lugar de la refriega se recogieron más de 90 casquillos calibre 7.62 utilizados por los fusiles AK-47, así como .45; .9 y .22. También un vehículo tipo Van modelo Windstar que fue abandonado por el grupo agresor, indican los reportes oficiales.
De acuerdo con la versión de testigos, en la zona quedaron esparcidos otros cuerpos, incluso detallan que observaron cómo los integrantes del grupo agresor se llevaban a sus compañeros heridos.
Sin embargo, las autoridades estatales y municipales ya no verificaron los testimonios porque decidieron retirarse del lugar debido a que estaban recibiendo reportes de que se aproximaban hombres armados.
Ayahualulco es un poblado de indígenas nahuas donde la mayoría de sus habitantes se dedican a la agricultura y la elaboración de artesanías de totomoxtle (hojas de maíz), donde la marginación y pobreza que abunda en la zona fue el escenario de la aparición de una célula del grupo guerrillero Ejército Revolucionario del Pueblo Insurgente (ERPI), hace más de una década.
Por su ubicación geográfica, Ayahualulco es una importante ruta de trasiego de drogas que conecta la región Centro y la Montaña.
El municipio de Chilapa de Álvarez, es otra zona de la entidad secuestrada por la delincuencia y actualmente es administrado por el alcalde priista Francisco García González, El Tepache, quien ha sido vinculado con las bandas delincuenciales que operan impunemente en esta zona considerada como la puerta de la Montaña guerrerense.
Incluso, este jueves 2, el alcalde priista fue detenido junto a dos de sus escoltas en un retén instalado por policías estatales de Morelos sobre la autopista Siglo XXI en las inmediaciones del municipio de Temoac, zona oriente de la entidad que colinda con Puebla.
La Secretaría de Seguridad Pública de Morelos emitió un comunicado donde informó que durante la revisión detectaron que uno de los escoltas de García González portaba un arma sin permiso oficial de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), indican reportes periodísticos del vecino estado.
Actualmente, en la cabecera municipal de Chilapa de Álvarez, conocida a escala nacional por su artesanía y exquisita gastronomía, es común observar retenes instalados en entradas y salidas por adolescentes armados donde han sido detenidos ciudadanos y funcionarios estatales y federales.
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