FUENTE: EL UNIVERSAL.
AUTOR: César Martínez Aznárez.
En este rubro supera a firmas como Exxon, Chevron, Shell y PetroChina
De acuerdo con el ranking de las Empresas Petroleras más Rentables, elaborado de manera especial para el presente informe periodístico, Pemex es la tercera más rentable a nivel mundial entre las 100 principales del mundo.
Esto es porque su retorno sobre el capital invertido (RoIC, por sus siglas en inglés) es de 64%, mientras que en el promedio de esas compañías listadas es cercano a 15%.
Lo anterior quiere decir que por cada peso que tiene invertido Petróleos Mexicanos en infraestructura, maquinaria, etcétera, su operación genera 64 centavos al año.
En este rubro, se encuentra por arriba de grandes firmas del sector como la rusa Rosneft y la compañía estadounidense Exxon, con 39% y 34%, respectivamente, de acuerdo con los cálculos elaborados con información de la agencia financiera S&P Capital IQ. Los bajos costos de producción de la petrolera mexicana es una de las principales causas de que aparezca dentro de los principales lugares del ranking de las petroleras.
Una comparación con las ocho compañías de la industria más grandes del mundo por ingresos y con las cuatro mayores de América Latina confirman esto: en Pemex, el costo por barril equivalente de petróleo y gas es de 6.9 dólares; en Shell, 12.5 dólares; en ExxonMobil, 9.9; Sinopec 17.7; BP 10.1; PetroChina 11.7; Total 8.4; Chevron 15.5 y Eni 10.8; en Petrobras, 13.9 dólares; PdVSA 7.1, y Ecopetrol 12.8 e YPF con 13.5.
Cabe señalar que la rentabilidad calculada no considera los impuestos al petróleo. La tasa RoIC es el porcentaje que representa la utilidad operativa (neta de impuestos a la renta), con respecto al capital empleado, y en la fórmula aquí utilizada no se dedujeron de la utilidad los impuestos o derechos sobre el petróleo, porque son muy variables entre países.
Recordemos que Pemex vuelca toda su renta económica a las arcas públicas a través de diversos impuestos y derechos. Si se quitaran dichos impuestos a las utilidades de la paraestatal para este ejercicio, la rentabilidad sería nula.
El impacto de la reforma
Como la Reforma Energética mantuvo el carácter de bien de dominio público para el petróleo, es de suponer que seguirá estando sujeto a la Ley Federal de Derechos, que impone nueve diferentes tasas a Pemex Exploración y Producción, y la más importante de ellas, el derecho ordinario sobre hidrocarburos en el artículo 254, es de 71.5% sobre una utilidad fiscal imponible.
Sin embargo, la reforma no dice nada específico acerca de impuestos o derechos que gravarán los contratos que se harán con los privados, y sólo señala al respecto que la Secretaría de Hacienda y Crédito Público tendrá la atribución de fijar las condiciones relativas a los asuntos fiscales de las licitaciones y los contratos.
La alta rentabilidad de Pemex aludida disminuye a medida que aumentan esos impuestos. Los privados participarían en contratos de exploración y producción nuevos, que tendrían su propia tasa de rentabilidad, pero también recibirán un retorno menor cuanto mayor sea el impuesto que paguen.
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