AUTOR: Víctor Cardoso.
Según el presidente de la Condusef, Mario Di Costanzo Armenta, resulta relevante el daño si se considera que en 2013 existían 23.5 millones de tarjetas de crédito en el mercado nacional y que, por ejemplo, el principal reclamo de los usuarios ante ese organismo y en contra de las instituciones financieras fue el de cargos, comisiones e intereses no reconocidos.
“No se vale”, manifestó el funcionario, quien precisó que las multas que comenzará a turnar el jurídico de la Condusef a las instituciones financieras emisoras de tarjetas de crédito se elevan a un monto de 32 millones de pesos.
Estas sanciones derivan de una revisión de la documentación que utilizan los emisores de tarjetas de crédito y que hacen firmar a sus clientes.
Los principales incumplimientos se refieren a: contrato no vigente; carátula no personalizada; estado de cuenta con información incorrecta de tasas (de interés y comisiones) y costo anual total (CAT); falta de congruencia de la carátula con otros documentos y, entre otros, estado de cuenta que carece de elementos normativos.
La revisión de documentos realizada por Condusef fue derivada de una evaluación hecha en marzo del año pasado. En esta, casos como Bancomer (el mayor emisor de tarjetas de crédito) obtuvo una calificación de 9.9 puntos (de 10) en esa evaluación, pero en la supervisión física de documentos sólo obtuvo 2.8; Scotiabank evaluó con 9.9 y en la supervisión obtuvo 7; y HSBC sacó 10 y bajó a 8.3, respectivamente.
En el caso de las llamadas Sofomes ER (Sociedades Financieras de Objeto Múltiple Entidades Reguladas) Santander Consumo calificó con 9.6 en la evaluación y sólo sacó seis en la supervisión; Banorte fue calificada con 9.7 y bajó a 8.5, respectivamente. Mientras que Ixe tuvo 9.7 y 6.9 en cada una; tarjetas Banamex tuvo nueve y retrocedió a 7.4 en la realidad, mientras que la sociedad financiera Inbursa había calificado con 9.7 y en los hechos únicamente 5.9.
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