El alcalde consideró que se aplica una ley selectiva en Michoacán, donde se persigue a los "delincuentes malos con el apoyo de delincuentes buenos, buenos para el gobierno".
En entrevista para el diario Reforma, sostuvo que El Abuelo es cerebro de las autodefensas, y el gobierno federal juega con fuego.
“Aplican una ley selectiva en Michoacán donde se persigue a los delincuentes malos con el apoyo de delincuentes buenos, buenos para el gobierno”, afirma el edil.
El Abuelo fue detenido en 2009 por el Ejército mexicano acusado de ser el cabecilla del cártel del Milenio; tras tres años de purgar una pena sólo por portación de arma prohibida y poseer un envoltorio de hachís, Farías regresó a Tepalcatepec.
“Si ésa es la ruta para un criminal que extorsionó, que asesinó, que traficó, pues muchos se deberían de formar en las oficinas de la PGR con una pistola y un envoltorio de hachís y pagarán solamente tres años por muchos delitos”, dijo el alcalde.
Para demostrar sus dichos, Valencia pidió preguntarle a familiares del ex edil Anastasio González, ejecutado en 2006; de Gilberto Valencia Vargas, ejecutado en 2009, o del periodista Benjamín González, asesinado en 2010.
“Todo mundo señalaba a ‘El Abuelo’ como jefe de plaza del municipio y de la región. No quiero ser irresponsable y no soy autoridad para hacer ese tipo de señalamientos. Quien ha osado estar en contra de su voluntad no ha vivido para contarlo”, dijo.
“Se me hace algo muy irresponsable y temerario que lo que se busca en Michoacán es, por un lado, pacificar a costa de todo, inclusive pasar por encima de las leyes y las instituciones y, por otro lado, vender un montaje, una película digna de Hollywood. Me quejaba mucho de lo que hacía Genaro García Luna, de sus montajes para las detenciones. Ahora, creo que si alguna vez perdí la capacidad de asombro, hoy perdí la capacidad de decepción”, sostuvo.
-¿Tiene las manos limpias para decir esto?, se le pregunta a Valencia.
“Las tengo”, responde. “Las tengo”, repite.
– ¿Y los Farías?
– No sé. Yo nunca he traficado drogas. Nunca, nunca, he asesinado ni siquiera he disparado un arma. Creo que hay quienes me juzgan, hay quienes me acusan, que no pueden decir lo mismo.
Valencia, abogado egresado de la Universidad Nicolaíta, cumple 300 días fuera del municipio para el que fue electo como alcalde, tras ser amenazado de muerte, y despacha en Morelia asuntos administrativos. Recientemente pidió licencia, pero el cabildo rechazó otorgársela.
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