Los presidentes de 3 naciones se reúnen este miércoles. Los temas de comercio y competitividad estarán en el centro del diálogo trilateral, además de aquellos que tienen que ver con seguridad y energía, así como los relacionados con Centroamérica y el Caribe.
Será la cuarta vez que Obama visita México en 5 años; ahora, a diferencia de anteriores ocasiones, no pernoctará en Toluca.
La cita es el próximo miércoles entre los presidentes Barack Obama (Estados Unidos), Enrique Peña Nieto (México) y el primer ministro Stephen Harper (Canadá).
La Casa Blanca indicó que los temas de comercio y competitividad estarán en el centro del diálogo trilateral, además de aquellos que tienen que ver con seguridad y energía, en adición a las relacionados con Centroamérica y el Caribe.
Al respecto, el ex embajador de México en Estados Unidos, Arturo Sarukhan, sostuvo que el encuentro “llega en un momento apropiado”.
“Primero, obviamente hemos visto el vigésimo aniversario del TLCAN (Tratado de Libre Comercio de América del Norte), y es un buen momento para hacer notar cómo ha funcionado o cómo no ha funcionado y los retos que hay por delante”, indicó.
Sarukhan hizo notar la naturaleza única del comercio en la región, que tan sólo entre México y Estados Unidos equivale a mil 400 millones de dólares de intercambio diario a través de sus fronteras.
“Canadá y México son los compradores número uno y dos de las exportaciones de Estados Unidos (…) de manera que tenemos una frontera del siglo 21 con un marco del siglo 20” que es el TLCAN, dijo.
Sarukhan, quien durante seis años sirvió como uno de los actores por parte de México en la preparación de estos encuentros, se refirió al tema de la energía como el otro componente de este buen momento.
“Por vez primera México está en una (buena) posición gracias a la reforma energética. Esto podría abrir la puerta para un verdadera seguridad, eficiencia e independencia energética de Norteamérica”, enfatizó.
La Secretaría de Hacienda informó que entre los objetivos de la reunión cumbre se encuentra fomentar los lazos comerciales, promover una mayor integración regional en aras del bienestar económico, amplio y sustentable de las tres naciones, así como la creación de empleos, la seguridad, el liderazgo empresarial y la productividad de la región.
Otro tema será la facilitación trilateral de tránsito de personas, que consiste en definir un mecanismo para hacer más rápido y menos burocrático el trámite migratorio y aduanal para los viajeros de los tres países. Aún se negocia con Canadá el tema de la eliminación de visas.
Oportunidad para tirar rostro
Toluca no es el lugar más idóneo para realizar una cumbre internacional, pero fue la ciudad que escogió Peña Nieto, informó esta mañana la corresponsal Dolia Estévez.
Especialistas en Washington anticipan que la cumbre será un escaparate para que Peña brille, “tire rostro” y proyecte a México como socio regional fuerte.
Sobre la Cumbre, en Noticias MVS, primera emisión, opinaron los analistas políticos, Lorenzo Meyer y Sergio Aguayo.
Meyer refirió que los presidentes mexicanos quieren su “tierra chica”, en el sentido de que Peña decidió que la Cumbre fuera en Toluca.
El historiador opinó que aunque en el Tratado de Libre Comercio se pone el énfasis que se ha cuadriplicado el valor del intercambio entre México y EU, nuestro país no ha crecido.
“¿En esos 20 años, ha crecido México?… no hemos crecido, estábamos mejor antes del tratado que después, y eso no lo puede negar nadie, podrán desmenuzarse renglones en los que hemos avanzado”, aseveró.
Aguayo mencionó que Peña y Obama sí conversarán en privado, pero no sabremos de qué hablarán exactamente. Apuntó que uno de los temas que deberían abordarse es el cambio de paradigma en EU respecto a la prohibición de la mariguana, pues el propio mandatario estadounidense ha dicho que ésta es “menos peligrosa que el alcohol”, mientras que en México “estamos atrasadísimos” y apenas se busca legislar en el DF.
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