“Deberían todos los Alcaldes de Michoacán tener protección y no porque sean ciudadanos privilegiados sino porque el asedio a los recursos públicos, en este caso de los municipios, es contra los Alcaldes”, dijo.
Luego del asesinato de Gustavo Garibay, Edil de Tanhuato, Baptista González advirtió que todos los Ediles michoacanos corren riesgo.
“No tienen que pedir uno por uno seguridad. Deberían tener protección todos porque la mayoría sufre el asedio de la delincuencia”, agregó.
Baptista González pidió al Gobierno federal que la estrategia de seguridad en Michoacán se amplíe a todo el Estado, no nada más a los 29 municipios de Tierra Caliente.
“La mayoría de los 113 municipios están amenazados o son víctima de la presión y chantaje de la delincuencia organizada, por eso tiene que haber una acción estatal”, expuso.
El director ejecutivo de AALMAC exigió que la Procuraduría General de la República (PGR) atraiga el caso de Garibay, pues en otros casos similares, las Procuradurías estatales no han hecho investigaciones.
“De todos los Alcaldes que han fallecido, ningún crimen ha sido aclarado, menos el de Ygnacio López que asesinaron el 7 de noviembre (de 2013)”, recriminó.
Después de un atentado en 2012, a Gustavo Garibay le fueron asignados como escoltas 20 policías federales, pero meses después se los retiraron y quedó con la vigilancia de tres agentes municipales solamente.
El Edil pidió en agosto pasado al Secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, que se le devolviera la protección que había tenido durante la Administración de Felipe Calderón, pero su reclamo no fue atendido.
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