En la Mesa Política de los lunes, en Noticias MVS, primera emisión, retomó las declaraciones del dirigente del PRI, César Camacho, contra Andrés Manuel López Obrador, lo que calificó como “oportunismo” político.
Señaló que el priista, en cambio, guarda silencio sobre las omisiones del gobierno federal y su partido, no solamente en Guerrero sino en otros estados donde impera la violencia.
Respecto al vínculo entre Lázaro Mazón, José Luis Abarca y López Obrador, Aguayo refirió que el problema de fondo es el método de reclutamiento de los candidatos a un puesto de elección popular.
Los partidos, señaló, pepenan lo que les cae con tal de ganar una elección, y “abundan los oportunistas que han hecho de la política una forma de vida”.
La pregunta es: ¿van a agarrar a todo lo que llegue para llegar a la presidencia? -preguntó el académico- o entenderán la magnitud de la crisis y modificarán el método de selección de candidatos.
“¿Cuántas cucharadas de corrupción puede uno ingerir sin contagiarse? Los políticos profesionales jamás nos dicen cuántas son las dosis que se tienen que tragar”, agregó.
A su vez, Lorenzo Meyer consideró que no todos los políticos son iguales, pero un líder político tiene que toparse con los corruptos aunque él no lo sea.
“Yo tampoco considero corrupto a AMLO… pero la política mexicana no está hecha por ángeles”, manifestó.
El historiador señaló que la política está hecha por una mezcla donde abunda la corrupción y son pocos los que se salvan de ella.
Respecto a lo publicado por el diario Reforma, sobre que AMLO fue informado de los vínculos de Abarca con el crimen organizado, recordó que él no es autoridad, y que el hecho de que le hayan entregad un documento no comprueba si lo vio o lo ignoró.
Ante este panorama, preguntó: “¿Cómo se puede arrancar una forma de hacer política que lleva tantos años, que ya se hizo parte del paisaje?”.
“Ya ningún ciudadano mexicano conciente duda de la enorme corrupción del entorno pero no nos podemos deshacer de los políticos, yo que más quisiera que desaparecieran todos, pero no es posible, tenemos que aceptar que vamos a seguir viviendo con ellos, que lo más que podemos hacer es limitarlos en ese instinto depredador y buscar a quienes sean proclives a la decencia y honestidad”, expresó.
Con casos como el de Iguala, “el descontento va en aumento”, subrayó. Si es imposible en México la política sin corrupción, entonces hay que limitarla, sostuvo.
Lorenzo recordó que a un mes de la agresión y desaparición de estudiantes de Ayotzinapa, con todo el aparato del Estado mexicano, no hay resultados y no encuentran a los 43 desaparecidos.
“Ahí es donde tenemos que poner la mirada y estar concientes de que a final de cuentas los responsables son quienes tienen el poder político del Estado”, remarcó.
Respecto a la corrupción, señaló que tiene un “enorme peso” en el país, viene de mucho tiempo atrás y “el grave problema es que no tenemos cómo salir de ella”.
Disolver a los partidos sería lo ideal, pero es imposible; acabar con la “clase política” también sería ideal, pero es imposible; ¿dónde demonios está la solución?, no la encuentro, dijo Meyer.
“¿Cómo podemos dar un salto y salirnos de eso? No hay una fórmula, tenemos que aprender a que la sociedad debe de estar exigiendo y ganar lentamente algunos espacios, pero vamos a tener que convivir con el infierno aunque no queramos”, abundó.
Denise Dresser cree que sí hay salida.
La politóloga indicó que debe haber un cambio institucional que cambie culturas.
Así como otros países la han combatido, este país también puede enfrentarse a la corrupción, sostuvo.
“Tiene que ver con procuradores independientes, sanciones a los corruptos, profesionalización de la policía, comisiones de la verdad, romper el pacto de impunidad”, detalló-
Para Denise no es cuestión genética la corrupción, “se comportan así porque pueden”, empujan sin encontrar resistencia en la propia sociedad cómplice de la corrucpión.
La sociedad comienza a ser corrupta desde que paga una mordida, ejemplificó.
Pero esto “se puede romper desde arriba con cambios institucionales de gran envergadura”, aseguró.
Además de que la ciudadanía deje de decir: “cuando roba por lo menos salpica”. Y entienda que por un corrupto no se vota, no se tiene trato, no se reeligen, ni se hace negociaciones en lo oscurito.
Dresser agregó que la sociedad tiene que empezar a denunciar, a cambiar, en lugar de ser cómplice; debe entender que si no actúa seguiremos hablando de este problema durante generaciones.
Sobre el PRD comentó que también tiene un problema de corrupción, quizá menor al del PRI.
Pero consideró una desvergüenza de César Camacho al acusar complicidad de AMLO con Abarca; que explique la de su partido con Arturo Montiel, con Mario Marín, Humberto Moreira, Ulises Ruiz, Raul Salinas, Eruviel Ávila, urgió la politóloga.
Por otro lado, “AMLO sí es responsable de muchas decisiones que el PRD tomó”; en cuanto a la información que se le proporcionó de Abarca, apuntó que López Obrador “decidió ignorarla”, y simplemente “cerró los ojos como ha cerrado los ojos ante otros fenómenos de corrupción”.
“Tiene que explicar por qué decidió favorecerlo a pesar de la información que había en su contra”, sostuvo.
Y lamentó que tanto el PRD como el PAN han emulado la forma de vida del PRI: repartirse el botín.
VÍDEO:
FUENTE: ARISTEGUI NOTICIAS.
AUTOR: REDACCIÓN.
No hay comentarios:
Publicar un comentario