Carola Solé, periodista de AFP, dio a conocer en octubre pasado "La noche olvidada de Cocula", sobre hechos ocurridos la madrugada del 1 de julio de 2013, en ese municipio guerrerense.
A raíz de la desaparición de 43 estudiantes en Iguala, Guerrero, investigamos las desapariciones en el municipio vecino, Cocula, donde hay reportes de que el año pasado un grupo criminal se llevó a 17 personas, sin que hasta ahora se sepa nada de ellos, expuso Carola Solé, periodista de AFP.
En entrevista para Noticias MVS primera emisión, la reportera señaló que al llegar a Cocula vio en la prensa local reportes “que no hicieron mucho ruido”, sobre la desaparición de 17 personas en julio 2013.
“Este caso me llama la atención… es un pueblo muy chiquitito… empezamos a preguntar y vimos que todo el pueblo tenía muy presente madrugada del 1 de julio del año pasado. Quedaron muy traumatizados”, contó.
Paralelamente, mientras recorrían Cocula, contactaban a las autoridades para saber qué es lo que había pasado.
La historia en la que coincidieron los entrevistados fue: En la madrugada del 1 de julio de 2013, un comando de 50 hombres armados, en 10 camionetas, irrumpió casa por casa, balaceando, rafagueando, y se llevó a varias personas.
“Imagínate el terror, levantarte a golpe de balaceras”,comentó.
Uno de los testimonios que recogió Carola es el de Maura Varela, pues su hijo Víctor Albarrán, quien tenía 15 años, fue uno de los secuestrados.
“Hablando con más personas parece que fueron Guerreros Unidos, que habían advertido que iban a hacer una limpia… este caso no tiene investigación intensa, hasta el momento no hay avances, no ha habido novedades, es delicado hablar con personas a las que la vida se les truncó”, abundó Solé.
Aquí un fragmento de “La noche olvidada de Cocula“, publicado por El Faro, el pasado 23 de octubre:
La fiscalía de la región de Guerrero dice que tiene denuncias de seis desaparecidos la madrugada del 1 de julio de 2013 en la comunidad de Cocula, mientras una docena de familiares de víctimas y otros vecinos consultados por la agencia AFP coinciden en que fueron 17, y aseguran que muchos padres no denunciaron por miedo a la connivencia de autoridades.
“Aquí se sabe todo, se escucha todo y se hablaba de 17 personas” desaparecidas, dice César Peñaloza, el alcalde de Cocula, un pueblo de 4,300 habitantes situado a unos 200 kilómetros de Ciudad de México.
Una de las familias que presentaron denuncia fue la del adolescente Víctor Albarrán. Su madre, Maura Varela, revive una noche de pesadilla que empezó con la llegada al pueblo de un comando de medio centenar de hombres armados que “venían rafagueando por toda la calle”. Varela y su esposo corrieron a sacar de la cama a sus hijos para esconderlos en el sótano pero les faltó Víctor, que estaba en el baño.
Cuando la mujer subió a buscar a su hijo de 15 años, tres encapuchados balearon la puerta de la casa y entraron. Los desconocidos les hicieron tirarse al suelo, patearon al joven y, después de preguntar infructuosamente por sus hermanos mayores, metieron a Víctor en una de sus diez camionetas donde ya había otros rehenes, muchos jóvenes, asegura la madre.
“Yo iba detrás de ellos, diciendo que no se lo llevaran, que estaba chico, que a él no se lo llevaran, pero no les importó”, llora esta mexicana de 43 años, una de las pocas vecinas que acepta dar su nombre, en el patio de su humilde casa.
“Eso parecía una guerra, hubo muchas detonaciones y la gente amaneció con miedo, sin querer salir de la casa”, recuerda de su lado Alfonso, otro habitante también temeroso de hablar porque él mismo fue secuestrado hace un tiempo.
Los vecinos aseguran que no han vuelto a saber de las 17 personas que el comando se habría llevado y lamentan que el despliegue posterior de medio centenar de militares y policías de Guerrero se marchó sin dar resultados un mes y medio después (…).
VÍDEO ENTREVISTA.
FUENTE: ARISTEGUI NOTICIAS.
AUTOR: REDACCIÓN.
No hay comentarios:
Publicar un comentario