Es interesante que ambos personajes, el comediante Eugenio Derbez y el comunicador Carlos Loret de Mola, trataron de curar a Televisa en salud, mencionando el tema de la casa blanca durante el Teletón, diciendo que no hay explicaciones satisfactorias; es, de alguna manera, una postura un poco tramposa porque tratan de aventarle la “papa caliente” a Angélica Rivera y Enrique Peña Nieto, como si no estuviera involucrada la televisora, señaló Denise Dresser.
En la Mesa Política de MVS, se analizó la forma en la que se abordó el tema de la casa blanca durante el Teletón, el fin de semana pasado. (Ver “Cóbrensela a Angélica Rivera, a Peña Nieto… no a los niños”: Loret de Mola en el Teletón” e “Inaugura Derbez el Teletón y habla de la “casa blanca” y de Ayotzinapa“).
La politóloga preguntó si hay un objetivo deliberado de la televisora de distanciarse de un presidente al cual ve en problemas y quien está afectando su reputación empresarial, o fue simplemente lo que opinaban los conductores, sin conocimiento de la empresa.
Indicó que la opinión pública ha exigido que se exhiba el contrato de exclusividad en el que le paga una cantidad millonaria -más de 100 millones de pesos- a Angélica Rivera. También se ha exigido que se hagan públicas las declaraciones de impuestos, no sólo las de 2010.
“Para que veamos cómo fue acumulando esta riqueza (Rivera) o si sólo fue producto de un pago ese contrato de exclusividad que se dio en el contexto de ella contrayendo matrimonio con el gobernador del Estado de México y después convirtiéndose en Primera Dama”, expuso.
El pago, subrayó, es cuestionable, pero en la televisora están tratando de oscurecer o tapar su papel en este asunto, volteando la atención al tema de la casa blanca, diciendo “pregúntele a Angélica Rivera, pregúntenle al Presidente, cóbrensela incluso a Televisa, cuando no hay manera de cobrársela más que con el rechazo a programas como el Teletón”.
Por su parte, Lorenzo Meyer comentó que en el Teletón se envió un tipo de mensaje que no ”para el grueso de los mexicanos pasa desapercibido”.
“Si bien Televisa es criatura del gobierno, al final se convierte en una especie de Frankenstein, y se independiza de su creador”, mencionó.
Ahora, el grupo manda señales de descontento, y Peña Nieto responde con señales de amor, refirió sobre las declaraciones del Presidente el domingo.
“Cuando tenían problemas de índole económica, ciertas trabas, se usaba esto y se quitaba la traba… no sé si esto sea económico, político o de otra índole”, añadió.
En tanto, Sergio Aguayo aseguró que esto es señal de que el gobierno no está controlando a los poderes fácticos, que “no sólo se deslindan sino hasta ridiculizan a la Primera Dama”.
“Tal vez sea un chantaje para algún negocio en proceso de elaboración”, dijo el académico.
AUTOR: REDACCIÓN.
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