Arturo González conversa de su documental ‘Llévate mis amores’, donde habla acerca de Las Patronas, mujeres que han dedicado casi 20 años de su vida a indocumentados que pasan por México.
Al despuntar el alba, la comunidad de Guadalupe, en Veracruz –conocida como La Patrona– inicia actividad entre sus habitantes, pero principalmente las mujeres son quienes ya están despiertas con un pie en la cocina.
Se les conoce como “Las Patronas”, dedicadas enteramente a preparar de comer y hacer “Lonche” pera los migrantes centroamericanos que cruzan a una casa de distancia, montados en “La bestia”, el tren de carga que cruza el Estado de Veracruz que llega hasta Orizaba.
Arturo González Villaseñor realizó un documental con la historia de estas luchadoras sociales. “Llévate mis amores” recopila la experiencia de vida de las señoras, donde el cineasta egresado de la Universidad Autónoma Metropolitana Unidad Xochimilco en la Licenciatura de Comunicación Social literalmente se mete “hasta la cocina”.
Presentó su proyecto a su alma mater la cual fungió como productora junto con Acanto Films y Pimienta Films. “Llévate mis amores” tuvo su estreno mundial en el la tercera edición de Los Cabos Film Festival, donde ganó el Premio a Mejor Película en la categoría México Primero.
‘Son mi familia’
El cineasta argumenta que al iniciar el proceso de grabación con las patronas, fue empezar a retratar momentos familiares y cotidianos, rompiendo la barrera entre los realizadores y ellas como protagonistas. “Había veces que ellas mismas nos tenían que cargar la cámara o el boom, (…) era ese contacto con el material y con nosotros hizo que las entrevistas o todo lo que sucede en la película sea como muy desapercibido”.
Al cuestionar acerca de cómo es que las patronas sostienen este ritmo de vida y si es que cuentan con el patrocinio de alguien, Villaseñor mostró respeto ante el tema y explicó que ellas no quieren formar una Asociación Civil o una sociedad que reciba caridad de los demás. “Porque ellas no lo necesitan, ellas lo único que quieren es ayudar a la gente, no necesitan una cuenta de ahorros para que la gente les deposite, no necesitan una A.C., no les interesa una organización como tal (…) no intentan venderse con nada, ‘si hemos seguido veinte años con la ayuda de la persona que llega aquí y nos visita, lo vamos a seguir haciendo otros veinte años más’”, Replica Villaseñor.
El comienzo del proyecto
Como proyecto de tesis, Arturo González Villaseñor se acercó a una radio comunitaria en el Estado de Veracruz, donde causalmente recolectaban botellas de PET que les llevaban a las patronas para que ellas las reciclaran llenándolas de agua y regalándolas a los migrantes.
Aunado a esto, también se les regalaba pan dulce de una de las panaderías de la comunidad cercana al pueblo de Guadalupe. Ahí Arturo en un completo mar de ingenuidad, por primera vez presenció a “La Bestia” quedando marcado de por vida.
La película del 2015
Después de ganar el premio a Mejor Película en la categoría México Primero en el Festival Internacional de Cine de Los Cabos en su edición 2014, el documental tuvo su estreno internacional en el Festival Internacional de Documentales de Amsterdam (IDFA por sus siglas en inglés).
El documental se le ha invitado a incursionar en festivales en todas partes del mundo: Sudáfrica, España, Francia, República Checa e Inglaterra. En México seguirá recorriendo certámenes como el Festival de Cine de Mérida y San Cristóbal de las Casas ambos a celebrarse en enero.
Dentro de la gira de documentales Ambulante estarán en el circuito que inicia a finales de enero, iniciando su recorrido en el Distrito Federal para continuar por el resto de la república hasta el mes de mayo. El documental estará en la sección Dictator’s Cut.
La muerte de la bestia
Desde hace siete meses, los indocumentados se encuentran con un obstáculo: ya no pueden “montar a la bestia”.
Y es que desde su descarrilamiento en mayo en Tierra Blanca Veracruz, se tomaron precauciones en la estación donde los viajeros desconocidos subían al tren operado por Ferrosur. En septiembre se levantó un cerco que impide el acceso directo a las vías ferroviarias donde parten los trenes con destino a Orizaba Veracruz.
Ante esta situación Villaseñor apuntó al consorcio de Grupo México y en específico al empresario Germán Larrea Mota Velasco como los responsables directos de este suceso.
“Los trenes están pasando vacíos actualmente o con muy pocos migrantes, los que logran subirse es porque se adentran más allá de Tierra Blanca y buscan las curvas que es donde frena el tren. (…) El flujo de migración no va a parar, ellos ahora solo tendrán que atravesar la selva o irse por la costa, y aquí es donde ellos peligran con toparse con los maras”. Añade Villaseñor.
-Pero ¿Y Qué sucede con las patronas?
“Ellas están desconcertadas, como que todavía no logran entender la magnitud del asunto, ahora hacen mucha comida menos, solo ven pasar a los trenes casi vacíos”. Enfatiza el comunicólogo.
Las patronas cocinaban alrededor de 150 comidas diarias para los indocumentados centroamericanos. Para ellas la duda sigue en el aire, y la angustia llena sus corazones al ahora, dejar de ver pasar a los migrantes que piden por su lonche. A punto de cumplir veinte años con su oficio y repentinamente cambiar su rutina diaria, podría hacerles entrar en depresión.
Se levanta el filme
Arturo González Villaseñor inició el documental como todo cineasta independiente: desde cero.
“Los proyectos ni las personas se deben de detener por los recursos, yo tampoco tenía dinero, venía saliendo de la universidad, no tenía los recursos para levantar una película”. Confesó el director del documental que fue apoyado también por Indira Cato y Nicolás Celis, en el área de producción.
Para levantar el proyecto el egresado de la UAM pidió apoyo a un sinnúmero de instituciones antes de poder tener el respaldo total de su casa de estudios, pero al final logró obtener la atención de la rectora quien se conmovió con el proyecto y decidieron patrocinar parte de la producción con equipo de grabación.
Televisa se acercó al realizador para auspiciar el proyecto pero prefirió declinar la oferta. La casa de la esperanza ubicada en Azcapotzalco también concedió recursos, Labo digital dio préstamo para el uso de sus salas de edición.
FUENTE: REPORTE INDIGO.
AUTOR: HIDALGO NEIRA.
No hay comentarios:
Publicar un comentario