Contrario a lo que estableció el procurador Jesús Murillo Karam, quien dijo que “no hay una sola evidencia de que haya intervenido el Ejército, ni una sola… ni siquiera había un grupo razonable de soldados en el lugar”, el abogado de los padres de Ayotzinapa, Vidulfo Rosales, reveló que existen al menos 10 declaraciones testimoniales -rendidas ante el Ministerio Público-, así como el testimonio de un policía, que señalan que los soldados sí actuaron la noche del 26 y madrugada del 27 de septiembre, en Iguala.
En entrevista para Noticias MVS primera emisión, indicó que algunos sobrevivientes de Ayotzinapa afirman que vieron patrullando al Ejército Mexicano, mientras otros aseguraron que fueron interceptados por militares.
“Por supuesto que sí hay evidencias: al menos 10 declaraciones testimoniales de los compañeros que de diferentes formas unos afirman que vieron al Ejército Mexicano patrullando a las orillas de Iguala, el día de los hechos, los otros afirman que fueron interceptados por ellos en una clínica”, expuso.
“Lo más contundente es que un policía de nombre Salvador Bravo Bárcenas hace una declaración muy reveladora: dice que el Ejército Mexicano, el 27 batallón de Infantería tenía pleno conocimiento desde el 2013 que Guerreros Unidos protegía a la Policía de Cocula y de Iguala y que eso se lo dieron a conocer al Ejército Mexicano y que no actúa, sino al contrario estuvo protegiendo a este grupo criminal y a la policía”, sostuvo el abogado.
“Esos dos elementos claros de parte de testimonios de sobrevivientes y el señalamiento que hace el policía son elementos suficientes para que se pueda indagar, llamar a cuentas dentro de la investigación al Ejército”, indicó.
“sostener que no tiene nada que ver es posición política de autoridades federales de mantenerlo al margen, de no inmiscuirlo, esta es una institución inmaculada y no tenemos que involucrarla en esto”, agregó.
Sobre el policía precisó: “Es uno de los policías detenidos que hoy está enfrentando proceso… hay este elemento probatorio anterior a los hechos, señalamiento directo de que la institución armada protegía al cártel Guerreros Unidos. Testimonios dicen que ahí estuvo, el día de los hechos en la escena del crimen durante mucho tiempo, entonces hay que investigarlo. ¿Por qué no tomó medidas preventivas? Hay una serie de interrogantes que tendría que responder.
“No estamos diciendo que ellos estuvieron secuestrando ni matando a los estudiantes, lo que estamos diciendo es que estuvo en la escena del crimen durante mucho tiempo”, subrayó.
Respecto a las declaraciones de los estudiantes sobrevivientes, Vidulfo expuso: “Después de la segunda agresión, llevaron a Édgar a un lugar donde puedan ingresar para preservar la vida, encuentran un hospital particular, rompen la puerta y abren la puerta y están adentro del hospital, 20 minutos o 15″.
“Llegaron los militares ahí. Les apuntan con las armas, les interrogan quiénes son, qué andan haciendo ahí, ellos se identifican, somos estudiantes de la Normal, incluso ahí hay amenazas con ellos, si tanto se sienten muy hombrecitos, ¿por qué ahora tienen miedo?, incluso les quitan identificaciones y los sacan de ahí, de la clínica los corren y los echan a la calle, empiezan a correr por todos lados, intentando salvaguardar la vida de Édgar y de ellos mismos, más tarde llegó patrulla de la Policía Preventiva y llevó a Édgar al hospital”, puntualizó.
“Ellos (los militares) sabían que eran estudiantes, incluso les quitaron sus identificaciones, nunca se las devolvieron, tendría que tener esas identificaciones en el poder”, reveló el abogado.
“Habían pasado 5 horas de agresiones y balaceras en Iguala, el Ejército sabía ya cuál era la situación en Iguala, a los estudiantes no les brindaron protección, los aventaron a la calle para que siguieran siendo perseguidos, eso ameritaría una investigación. Hay elementos periféricos a esta investigación que hicieron, que propiciaron que los hechos de Iguala se dieran así de manera tan deleznable como ocurrieron, y eso tiene que ver con el Ejército mexicano, que plenamente sabía, conocía, que el día de los hechos omitió, no actuó, al contrario, estuvo en la escena del crimen, brindando una especie de protección a los grupos delincuenciales”, senteció.
Además, urgió investigar desde al ex gobernador de Guerrero, Ángel Aguirre, así como a políticos de la zona norte del estado; ese “entorno de la red política-delincuencial, tiene que investigarse también, no se puede dejar de lado, forma parte de esta investigación y es una de las razones por las que no podemos cerrar el caso”.
ENTREVISTA:
FUENTE: ARISTEGUI NOTICIAS.
AUTOR: REDACCIÓN.
No hay comentarios:
Publicar un comentario