México, DF. El Senado de la República aprobó, sin cambios, en lo general, la minuta sobre el Sistema Nacional Anticorrupción, una reforma constitucional para combatir y sancionar “uno de los males endémicos del país”, pero que deja pendientes importantes, como eliminar el fuero del presidente de la República y de los demás servidores públicos.
En tribuna, los presidentes de tres de las comisiones dictaminadoras, los priístas Cristina Díaz y Enrique Burgos, así como el senador del PVEM, Pablo Escudero, resaltaron que se sientan las bases para frenar la corrupción, al “dar dientes”, vía mayores facultades, a la Auditoría Superior de la Federación (ASF) la que podrá fiscalizar en tiempo real el uso de los recursos públicos y sancionar las faltas administrativas graves.
Se fortalece también, expresaron, al Tribunal de Justicia Administrativa.
En contraparte, senadores del PAN, PRD y PT advirtieron que, aunque se trata de un paso importante para castigar a los funcionarios que se enriquecen con los recursos que son de todos los mexicanos, hay vacíos en la reforma que deberán cubrirse a la brevedad o de lo contrario ese Sistema Nacional Anticorrupción será inviable.
El perredista Alejandro Encinas, presidente de la Comisión de Puntos Constitucionales pidió que de inmediato se comience a dictaminar la minuta para reforma el artículo 108 Constitucional, ya que el fuero de los servidores públicos, “en lugar de inmunidad, permite la impunidad” del ejecutivo federal y los demás funcionarios.
El senador del PAN, Javier Corral, resaltó que el haber dejado sin tocar el artículo 108 responde a “un pacto de impunidad entre sectores”, toda vez que “la corrupción navega como nunca antes por las aguas negras de un gobierno que borró toda línea de separación entre negocios y política”. Recalcó que se trata de reformas en el ámbito administrativo, no penal.
Igualmente, el también senador del PAN, Ernesto Cordero, recalcó que la corrupción en México es un cáncer y el remedio que se da en la reforma “es una aspirina”, porque no sólo el Presidente de la República queda fuera. No se podrá sancionar a los gobernadores y presidentes municipales, ni los llamados “moches” de legisladores que se benefician con la gestión de recursos presupuestales. Queda fuera también el seguimiento de los recursos millonarios asignados al Congreso.
Los panistas presentaron reservas, a fin de incluir esos temas, entre ellas al 108 Constitucional, a fin de que el ejecutivo federal sea juzgado no sólo por tradición a la patria, sino también por conflicto de interés, cohecho y otros actos de corrupción.
A su vez, el perredista, Armando Ríos Piter, señaló que tal como se aprobó la minuta, el fuero impide que se investigue al presidente Enrique Peña Nieto por el escándalo de la llamada “Casa Blanca”, un monumento a la corrupción”, similar al de la “Colina del Perro” del entonces presidente José López Portillo.
El coordinador del PT, Manuel Bartlett, recordó que el Sistema Nacional Anticorrupción fue la primera propuesta de campaña de Peña Nieto y ayer se aprobó con tres años de retraso “para tratar de lavar su escándalo por la Casa Blanca o los conflictos de interés en que ha incurrido su administración”. Se trata, insistió, de “un regalo” para el Presidente de la República en pleno proceso electoral del próximo 7 de junio.
La también legisladora del PRI, Graciela Ortíz, pidió “no ver la paja en el ojo ajeno” y advirtió que las nuevas facultades de la ASF permitirán revisar ejercicios anteriores, entre ellos el del gobierno del Distrito Federal por la línea 12 del Metro.
Durante la discusión se mencionaron en tribuna diversas cifras sobre el impacto de la corrupción. El senador Encinas recalcó que el costo para la economía es enorme, ya que en diez años México perdió 86 mil millones de dólares por actos de corrupción, que han provocado además, que la inversión extranjera disminuyera al 50 por ciento, según datos de la ASF.
Lamentó que la corrupción se haya convertido en un mal endémico y en una forma de hacer gobierno, pero también en una forma en que a la sociedad enfrenta los problemas para resolver muchos de sus trámites.
La priísta Cristina Díaz, resaltó: “Nos duele, nos preocupa y nos ocupa que México se ocupe en el segundo lugar como el país de más impunidad en un ranking de 59 países, de acuerdo con el índice global de impunidad 2015”.
La reforma se aprobó en lo general con 97 votos a favor, ocho en contra y dos abstenciones, luego de seis horas de discusión, ya que hubo cerca de 30 oradores, una buena parte de ellos, que repitieron una y otra vez lo expresado ya por sus antecesores.
Falta la aprobación en lo particular de ese Sistema Nacional Anticorrupción, hay 35 reservas, por lo que la discusión podría prolongarse por varias horas más.
FUENTE: LA JORNADA.
AUTOR: ANDREA BECERRIL/ VÍCTOR BALLINAS.
No hay comentarios:
Publicar un comentario