Entre el viernes y el sábado en Los Pinos se decidirá quien va a ser el candidato del PRI a la gubernatura de Puebla. Hasta el inicio de la presente semana no hay nada definido para ninguno de los cinco aspirantes que buscan la nominación, aunque todo indica que la decisión se podría decidir entre dos priistas Alberto Jiménez Merino y Blanca Alcalá Ruiz, quienes habrían obtenido los mejores números en la encuesta que el tricolor levantó ente finales de noviembre e inicio de diciembre de 2015.
Una fuente cercana al Comité Ejecutivo Nacional (CEN) del PRI señala que el ex alcalde de la ciudad de Puebla Enrique Doger Guerrero ha sido evaluado como un priista bien posicionado, con un alto índice de intención del voto, pero también es quien tiene, de los cinco aspirantes a la candidatura, las opiniones más negativas y eso lo convertiría en un candidato muy vulnerable. Esas son las causas por las cuales tiene medio cuerpo fuera de la contienda por la postulación.
Se dice que es el único de los cinco aspirantes que ya habría negociado con el CEN del PRI que a cambio de no ser candidato a la gubernatura, podría ser abanderado a una senaduría en el año 2018 y al mismo tiempo le otorgarían un par de delegaciones federales a miembros de su equipo político.
Aun así, el nombre de Enrique Doger aparecerá en las carpetas que Manlio Fabio Beltrones, el presidente nacional del PRI, llevará este fin de semana a Los Pinos en donde acordará con el presidente Enrique Peña Nieto quien será el candidato para Puebla.
El ex alcalde de la capital podría ser la tercera alternativa en caso de que no se decida entre Jiménez Marino y Alcalá Ruiz.
El nombre de Alberto Jiménez Marino, el delegado de Sagarpa, se ha colado hasta la etapa final debido a que fue el aspirante que más creció en los últimos tres meses, por haber emprendido una labor especifica para posicionarse como posible candidato, luego de que a principios de septiembre casi nadie la ubicaba como alguien que estaba buscando ser el abanderado priista.
La senadora Blanca Alcalá tiene los mejores números y la mejor imagen del conjunto de políticos de todo el estado de Puebla, pero hay dos factores que en el último tramo del año pasado jugaron en su contra:
El primero es que causó mucho desagrado en la cúpula del PRI que la senadora haya creado una campaña para hacer creer que el partido ya había decidido que ella sería la candidata, cuando apenas se estaba empezando a levantar la encuesta que va a legitimar la designación del abanderado priista.
Trascendió que en el CEN se le comunicó que diferentes mediciones la colocan como el mejor prospecto, pero que eso no significaba darle el banderazo para que se promoviera como la ungida por el tricolor.
El segundo es que se le pidió empezar a hacer labores para promover su imagen en Puebla y la legisladora poco ha hecho para aumentar su presencia en el estado, lo que se dice generó malestar en la dirigencia del PRI, puesto que el tricolor ya necesita contar con trabajo político para poder ser competitivo contra la maquinaría electoral del morenovallismo.
Esa inmovilidad de Blanca Alcalá, quien tiene apariciones esporádicas en el estado, parecería que es para mandar el mensaje de que no quiere ser candidata en esta contienda. A favor de Blanca Alcalá juega el impulso que le están dando el senador Emilio Gamboa Patrón, el diputado federal Jorge Estefan Chidiac y el secretario de Hacienda, Luis Videgaray.
Muchos creen que la intervención de esos tres priistas de alto nivel va a ser el factor decisivo para que en Los Pinos se tome la decisión por la senadora.
Este fin de semana podría haber humo blanco saliendo de Los Pinos para decidir el rumbo de la contienda por la minigubernatura de Puebla.
FUENTE: LA JORNADA DE ORIENTE.
AUTOR: FERMÍN ALEJANDRO GARCÍA.
LINK: http://www.lajornadadeoriente.com.mx/2016/01/05/en-los-pinos-se-decidira-entre-blanca-alcala-y-alberto-jimenez-merino/
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