Habitantes de la congregación Mundo Nuevo, de este municipio, realizaron una marcha desde esa comunidad a la planta de Clorados III, en el complejo Petroquímico Pajaritos, para exigir que los dejen entrar a revisar que no se oculten los cuerpos de los obreros que fallecieron por la explosión del miércoles.
Los inconformes son familiares de trabajadores desaparecidos desde la tarde del estallido, que ha dejado oficialmente 28 muertos y más de 130 heridos. La angustia aumenta porque sus parientes no aparecen ni en la lista de heridos ni en la de fallecidos.
Ellos llegaron hasta el portón principal de la empresa Petroquímica Mexicana de Vinilo (PMV), donde hubo varios conatos de bronca con los militares que resguardan el inmueble.
Los manifestantes detuvieron al conductor de una carroza funeraria, quien les informó que se encontraron tres cuerpos más en una cuneta, pero que aún no entra el personal de la Fiscalía estatal.
Aun cuando se levantó la contingencia por los gases tóxicos descargados al ambiente, personal de PMV les informó que todavía no hay condiciones de seguridad suficientes para hacer recorridos por la planta.
Basta de mentiras, gritaban
Durante varios minutos los quejosos zarandearon la reja, mientras del otro lado de los barrotes el personal del Ejército la sostenía en su lugar. Ya basta de mentiras, queremos justicia, gritaban.
Señalaron que tienen el mismo derecho que el presidente Enrique Peña Nieto de supervisar el área de la explosión y revisar que no se estén ocultando los cuerpos, ya que existen rumores de que los están sacando por otros accesos.
Por un altavoz, el personal que custodia del complejo habló de permitir el ingreso a los familiares directos, pero sólo pudieron llegar al primer filtro y, además, fueron condicionados a no entrar con teléfonos o cámaras.
Los manifestantes se retiraron, pero advirtieron que podrían bloquear la circulación por el puente Coatzacoalcos uno.
Familiares de los desaparecidos fueron recibidos por especialistas en tanatología, quienes los preparan para ver las fotos de los cuerpos encontrados.
En la ciudad de Veracruz, familiares de los trabajadores heridos informaron que hace apenas unas horas empezaron a recibir apoyo de las empresas contratistas, mientras Pemex y Mexichem no se han comunicado con ellos. Varios piden apoyo a la población para poder mantenerse en la ciudad mientras sus familiares heridos son atendidos.
Ciudadanos de Mundo Nuevo levantaron las plumas de la caseta de cobro del puente Coatza-coalcos uno y recaudan dinero para entregarlo a las familias con heridos o muertos.
Los familiares de personas hospitalizadas y los propios trabajadores de la empresa PMV calificaron de montaje la visita de Enrique Peña Nieto al hospital de Pemex, pues allí sólo se encontraban internados directivos de la planta y heridos de menor gravedad.
Juan Gómez López, de 20 años de edad, es atendido en el hospital de especialidades debido a las quemaduras que tiene en todo el cuerpo. Ana Cristina Gómez López, su hermana, pidió al municipio que los apoye con recursos para sostenerse en el puerto mientras dan de alta a su pariente.
Julio César Domínguez Blanco también está internado en terapia intensiva en Veracruz con quemaduras internas muy graves en pulmones e hígado y de segundo grado en todo el cuerpo. Su hermano Jorge refirió que la familia ha hecho muchos gastos. Apenas este viernes la constructora que contrató a Julio César se puso en contacto con ellos y los empezó a apoyar.
Este sábado, peritos de la Fiscalía General del Estado, proveniente de Xalapa, provistos de drones y de binomios caninos llegaron al complejo para analizar los restos de los tres fallecidos que aún no han sido identificados y permanecen en la zona del siniestro, confirmó la empresa en su cuenta de Twitter.
Los especialistas tomaron pruebas de los cuerpos y de familiares, pero no pudieron hacer la identificación por el estado en que se encuentran los cadáveres: quemaduras muy severas dañaron la mayor parte de la piel.
Frente a la empresa se produjo otra manifestación, ésta de trabajadores de 40 empresas contratistas las cuales exigen que la empresa ICA Flour, encargada de los trabajos de reparación, les pague el salario devengado durante la semana reciente, pues temen que se vaya sin hacerlo y los deje sin trabajo.
Los directivos de ICA les informaron que este sábado les depositarían sus salarios y en cuanto se limpie la zona regresaran a laborar.
Los manifestantes reiteraron que desde el lunes ya se percibían las fugas de cloro, incluso 24 horas antes del accidente realizaron un simulacro de evacuación. La explosión se produjo por la negligencia de los supervisores de ICA y PMV, quienes autorizaron seguir con los trabajos aun cuando ya se habían localizado dos fugas en la línea de cloro y etano, dijeron.
Fuente: La Jornada
Autoras: Sayda Chiñas Córdova y Eirinet Gómez
http://www.jornada.unam.mx/2016/04/24/politica/008n1pol