domingo, 8 de mayo de 2016

Intensifican operativo policiaco en Chilapa para evitar el ingreso de civiles armados

Chilpancingo, 7 de mayo. La tarde de este viernes unos 300 civiles armados intentaron ingresar nuevamente a la cabecera municipal de Zitlala en la búsqueda de los líderes del grupo delictivo Los Rojos y de una mujer desaparecida.

En respuesta esta mañana Chilapa y Zitlala amanecieron con el sobrevuelo de 12 helicópteros y una avionetas que, según dijo el gobierno municipal, forman parte del operativo para evitar el ingreso de los civiles armados.

La tarde ayer unos 300 civiles fueron vistos por el crucero que conecta a las comunidades de Nejapa, Atempa, en Chilapa, con la carretera que conduce al municipio de Zitlala.

Sin embargo, los civiles armados fueron interceptados por militares y policías federales y estatales quienes les impidieron el paso.

La noche del pasado martes, los mismos civiles armados intentaron entrar a Chilapa para llegar al municipio de Zitlala. Ese día fueron detenidos por militares y policías federales en el crucero de Los Ajos, el cual conduce a la comunidad de Atzacoaloya y las localidades que unen al municipio de Quechultenango, donde está la sede del grupo delictivo Los Ardillos.

No obstante, al día siguiente, el miércoles, los civiles armados llegaron a la cabecera municipal de Zitlala, por una vía alterna, por la comunidad de Nejapa, como lo intentaron este viernes.

José Apolonio Villanueva Jiménez, comisario ejidal de Xiloxuchican, quien encabezó a los civiles armados, explicó que llegaron a Zitlala para ayudar en la búsqueda de Marisol Alejandra Domínguez, de 30 años de edad, quien es originaria del poblado de Tlaltempanapa y que desapareció la tarde del martes en esa cabecera municipal.

Alejandra Domínguez, indicó el comisario ejidal, es esposa de uno de los integrantes de la organización Comunitarios por la Paz y la Justicia, como se han autodenominado los civiles armados.

Villanueva Jiménez acusó de la desaparición de la mujer al líder del grupo criminal de Los Rojos, Zenen Nava Sánchez, El Chaparro.

La mañana de este sábado, unos 12 helicópteros de la Marina y el Ejércitos, junto con una avioneta, sobrevolaron los municipios de Chilapa y Zitlala.

También policías federales, estatales y militares instalaron retenes de revisión para impedir el ingreso de los civiles armados.

Este mismo grupo de civiles armados fue el que la tarde del sábado 9 de mayo del año pasado, en decenas de camionetas de redilas, irrumpieron en la cabecera municipal de Chilapa. Lo primero que hicieron fue tomar la comandancia de la Policía Municipal: desarmaron a los agentes, sacaron las patrullas y con eso instalaron retenes en la glorieta Eucaria Apreza, así como en las entradas y salidas de la ciudad.

Los civiles armados dijeron que provenían de las comunidades del sur del municipio; se declararon comunitarios e informaron que iban por los líderes del grupo delictivo Los Rojos.

En los días siguientes a la irrupción de los civiles armados, el tema principal se volvió la devolución de los detenidos y no la presencia misma de los armados. La mañana del quinto día, militares y policías federales y estatales desarmaron a los armados y acordaron su salida. Los civiles salieron, pero no entregaron a los detenidos. A partir de ahí, en Chilapa se reveló la tragedia que se vive desde hace un par de años atrás.

Primeras versiones

La Policías comunitarias de Chilapa, adheridos a la Coordinadora Regional de Autoridades Comunitarias (Crac), negaron que hayan sido ellos los que tomaron el pasado miércoles la cabecera municipal de Zitlala.

Por medio de comunicado, la Policía Comunitaria de Chilapa y José Joaquín Herrera, informaron que coordinadores y consejeros se reunieron para acordar precisar que ellos no participaron en la incursión del pasado miércoles en el municipio de Zitlala, los civiles armados.

La noche del pasado martes en las primeras versiones sobre el ingreso de los civiles armados, se dijo que se trataba de las Policía Comunitaria de Chilapa que tiene sede en la comunidad de Rincón de Chautla.

“La Crac-PC-PF desmiente la publicación sobre la participación de este tipo de actos y manifiesta que hasta hoy no ha hecho ningún operativo fuera de nuestro territorio, apegándonos al reglamento interno”, precisó la Policía comunitaria de la Crac.

Los policías comunitarios se deslindaron de los civiles armados que, dicen, están aglutinados en la Organización de comunitarios por el Paz y la Justicia.

“La Policía Comunitaria tiene una estructura apegada al reglamento interno y no comparte ideas con grupos delictivos ni con policías comunitarios autodenominados por la Paz y la Justicia”.

En el texto apuntaron que los grupos criminales, Los Rojos y Los Ardillos, están buscando confrontar a la Policía Comunitaria con el gobierno, para responsabilizarlos de los homicidios y secuestros que se dan en la región.

“No permitiremos que gente ajena nos utilice como escudo diciendo que son de la Crac de Rincón de Chautla”, insiste.

La corporación indígena aclaró que en ningún momento han realizado ningún operativo fuera de su territorio. Asimismo indicó que desde que se fundó la guardia de la Crac en Chilapa, en su territorio no se ha registrado ningún secuestro.



Fuente: La Jornada Guerrero
Autor: Arturo de Dios Palma
http://www.lajornadaguerrero.com.mx/2016/05/08/index.php?section=sociedad&article=005n1soc