“Han vuelto a trabajar en la zona urbana de Observatorio y en la zona militar están talando demasiados árboles, por lo que podemos ver desde la distancia”, denunciaron los Vecinos Unidos de la Zona Poniente, que resisten en avance del Tren Interurbano que pretende unir la Ciudad de México con Toluca, capital del Estado de México.
Desde que en Setiembre del año pasado el gobierno anunció un cambio en el trazado del tren, haciéndolo pasar por la Barranca del Río Tacubaya, los vecinos han intentado acceder a información oficial acerca del mismo y la afectación que esta mega obra tendrá para miles de vecinos, no sólo de las 11 colonias de la delegación Álvaro Obregón en el Poniente de la capital, sino también en Santa Fé y de los pueblos y comunidades del Estado de México, como Cuajimalpa, por ejemplo.
“El gobierno está trabajando sin informar a la gente. No sabemos por ejemplo, cómo van a manejar el derecho de vía, una reglamentación que obliga a que toda obra vial debe dejar un cierto margen de cada lado. En el caso de esta obra, estimamos que sean 17 metros mínimo de cada lado. Las calles por dónde entraría el trazado a esta zona de la ciudad de México son muy pequeñas. El gobierno dice que no habrá derecho de vía, pero tememos que sea falso y a continuación vengan los desalojos” explicó Juan Barrera a Desinformémonos, integrante de la organización vecinal del Poniente.
En Diciembre, a fuerza de movilización, los vecinos lograron que se instalara una Mesa de Diálogo con el gobierno para que respondiera a sus interrogantes. Sin embargo, la mesa fue un fracaso. Primero, el gobierno envió como interlocutor a un ex-delegado, actual diputado que no tenía ninguna capacidad de negociación. Luego, fueron representantes del gobierno de la ciudad de México y de la delegación, argumentando que tampoco tenían información ya que el proyecto es del Gobierno Federal.
“Las mesas de diálogo se rompieron porque en ningún momento nos dieron acceso a la información requerida. Lo que conocemos del proyecto ha sido producto de estudios científicos independientes”
Sí fue presentado a la Secretaria de Medio Ambiente (SEMARNAT) el Manifiesto de Impacto Ambiental del mega-proyecto, el cual fue aprobado de manera express (tal y como sucedió con el del Nuevo Aeropuerto de la Ciudad de México, por ejemplo) y declara que no hay riesgo alguno en que el tren pase por la zona de la barranca de Tacubaya.
“Tanto el suelo de Santa Fé hasta Observatorio es arenoso, hay túneles y minas subterráneas que se han ido descubriendo a medida que el terreno se ha ido hundiendo. El peligro es latente ya que los cimientos del Interurbano quedarían sobre dos presas subterráneas, que regulan el agua que viene de Santa Fé y que en los casos que han colapsado, como es un sistema interconectado, llegaron a inundar las colonia Roma y Condesa, del centro de la ciudad”
Apuntan los vecinos que la propia Comisión Nacional del Agua (CONAGUA) y su Sistema de Seguridad de Presas establecen en su reglamentación que no puede construirse en la zona de las presas, sin embargo, la SEMARNAT dio el visto bueno, incumpliendo la legislación de sus propias reparticiones.
“Según calculamos, quieren pasar el tren por encima de 8 manantiales de agua potable. El Manifiesto de Impacto Ambiental omite también que se destruirá una de las zonas de preservación de flora y fauna endémica”.
La empresa encargada del tercer tramo de la obra, ya en la ciudad de México, es mexicana y cuenta con algunos socios españoles, una constructora llamada CAABSA, que ya ha construido distintos condominios en Santa Fé, incluso uno de sus centros comerciales.
“El gobierno mantiene la construcción como una obra pública, sin embargo, en las mesas de trabajo sostuvo que será la empresa la que tenga que responder por las obras de mitigación de los impactos de la construcción.”
Además del tren, la obra proyectada es mucho más grande, ya que no se trata únicamente de la construcción del tren Interurbano México – Toluca, sino que conforme ha pasado el tiempo el problema es mayor. Se le han agregado los proyectos de ampliación de las líneas 9 y 12, hasta el Centro de Transferencia Modal (Cetram) de Observatorio, que se convertiría en nudo y estación del interurbano, así como destino de las líneas, creando una mega estación, del estilo de Pantitlán o Cuatro Caminos.
“Revisando la información pública sobre la construcción del Interurbano se ve cómo esta obra está pensada para ‘beneficio’ del tránsito de coches del corazón financiero de Santa Fé, más que para facilitar el transporte de los vecinos de Toluca y el Estado de México. De hecho, no hay una sola estación proyectada entre Lerma y Santa Fé.”
Lo vecinos vuelven a levantar la voz para obtener información de qué es lo que está sucediendo en los predios en los que la obra se ha retomado. “Resulta hasta paradójico cómo en en toda la ciudad se promueven acciones para mitigar la contingencia ambiental mientras en esta zona se talan árboles de manera indiscriminada” reflexionó Juan.
FUENTE: DESINFORMÁMONOS.
AUTOR: ELIANA GILET
LINK: http://desinformemonos.org.mx/retoman-obras-del-tren-interurbano-denuncian-vecinos-unidos-del-poniente-de-mexico/