El Centro de Estudios Espinosa Yglesias (CEEY) pidió al Gobierno federal y a la prensa evitar todo uso público y político, hasta que se haga un nuevo levantamiento consensuado, comparable y transparente para 2018, del Ingreso Trimestral Promedio del Hogar del Módulo de Condiciones Socioeconómicas 2015 (MCS 2015) del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
También pidió a Coneval no sacar el reporte de pobreza porque, con los datos del Inegi, podría confundirse a la sociedad mexicana.
De acuerdo con el centro especializado, el cálculo es “un error” porque no es comparable con levantamientos anteriores; no puede ser el inicio de un nuevo método de medición, y se corre el riesgo del uso político como ya lo hizo el lunes pasado Rafael Moreno Valle, el Gobernador de Puebla, el cuarto estado más pobre del país.
“Es una propuesta. Los primeros obligados serían los que están contemplados en la Ley General de Desarrollo Social que fundamentalmente es el Gobierno federal y sus dependencias. Aunque no estén incluidos en la Ley, esto tiene que extenderse a las entidades federativas y a los municipios, y a toda autoridad que tenga alguna injerencia en el tema […]. El Coneval es el que ha advertido que no se pueden hacer comparaciones, están ciñéndose a esta recomendación […]. Sería conveniente que también la prensa porque la información que se va a estar manejando al hacer comparaciones no sabemos si puede confirmarse o no. Es una recomendación para el caso de los medios de comunicación que tienen toda la libertad de escribir lo que consideren de interés”, afirmó en entrevista Rodolfo de la Torre García, Director del Programa de Desarrollo Social con Equidad del CEEY.En lo absoluto es un acto de presión, especificó, se trata de “dejar un espacio para que las instituciones autónomas puedan establecer la manera más adecuada de llegar a conclusiones respecto a la información y su comparabilidad, y no contaminar su trabajo si se les está bombardeando con avances o retrocesos en la política social, pobreza, desigualdad, lo que hace más difícil su trabajo”.
El hecho de que el Inegi, sin consultar, haya cambiado los criterios de levantamiento y verificación de la información en campo sobre el ingreso del hogar, afirmó el comunicado, se traduce en “una aparente falla en términos de transparencia y de coordinación con el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval)”, encargado de la medición de la pobreza nacional con base en los datos del instituto gubernamental.
–¿Qué uso político podría dársele?
–Dar la impresión de que hay avances en materia de pobreza, desigualdad o de ingresos cuando en realidad no lo sabemos. Un caso muy concreto de esta situación ya se está dando en Puebla. Ha habido funcionarios, el propio Gobernador [Rafael Moreno Valle] y muchos medios que han transmitido la impresión de que el estado avanzó 23 lugares en la reducción de la desigualdad cuando es materialmente imposible saberlo con la información que actualmente se tiene. En los últimos dos días ha estado circulando en varias notas periodísticas declaraciones del Gobernador. Esta información es a todas luces insostenible.
El lunes pasado, tras inaugurar el Centro Integral de Servicios, el panista Moreno Valle aseguró que Puebla fue uno de los estados del país que más avanzó en desigualdad social, citando el Módulo de Condiciones Socioeconómicas del Inegi. El estado, dijo, avanzó 23 posiciones y se ubica en el noveno lugar en este rubro a nivel nacional.
“Hoy con datos oficiales estamos dando cuenta de la política y del trabajo que encabezo”, declaró.
PETICIONES DEL CEEY
En un comunicado, el Centro de Estudios Espinosa Iglesias demandó hoy que los sujetos obligados por la Ley General de Desarrollo Social –la administración pública del gobierno federal– se abstengan de todo uso público de la información de ingresos de los hogares y pidió a las autoridades de las entidades federativas, los municipios y los actores políticos en general evitar la difusión pública de probables avances o retrocesos respecto al pasado en los indicadores que se puedan derivar del Módulo de Condiciones Socioeconómicas 2015, dada su patente y oficial falta de comparabilidad.
Por ello, el CEEY también demandó permitir que el Coneval no emita cifras de pobreza con base en los datos del MCS 2015 para no confundir a la sociedad” y evitar que se utilice esa información “con finalidades políticas”, aun cuando ello impida actualizar la medición de pobreza por entidad federativa de 2010.
Medir no sólo la magnitud de la pobreza y su dinámica, sino la desigualdad, es fundamental para tener certezas en torno a costos y beneficios de la política social y cómo éstos se reparten en los distintos grupos de la población, dijo el CEEY.
Por lo tanto, el CEEY pidió legislar de “manera urgente” sobre la autonomía del Coneval, que fue aprobada constitucionalmente en 2014; legislación que se encuentra demorada en el Senado de la República.
Es fundamental, también consideró, consolidar la autonomía y preservar la credibilidad que tienen tanto el Inegi como el Coneval.
Asimismo, requirió que la Encuesta Nacional de Ingresos y Gastos de los Hogares (ENIGH) 2018 sea levantada con la metodología utilizada en 2014 y 2016 para que se pueda enlazar con los datos históricos.
El pasado viernes, el Inegi publicó datos del ingreso de los hogares que no son comparables con los de los levantamientos previos, lo que imposibilita al Coneval realizar un cálculo de la pobreza que sea comparable con su serie histórica, iniciada apenas en 2008.
Este Consejo debe realizar mediciones de pobreza comparables en el tiempo para, al tener la cifra de mexicanos en situación de pobreza, poder guiar las acciones de política social, y determinar si la incidencia de la pobreza aumenta o disminuye en el transcurso del tiempo.FUENTE: SIN EMBARGO.
AUTOR: DULCE OLVERA.
LINK: http://www.sinembargo.mx/20-07-2016/3069488