CIUDAD DE MÉXICO: Las autoridades mexicanas han sido incapaces de dar respuesta al persistente incremento de desapariciones forzadas, sobre todo, tras el inicio de la “guerra contra el narcotráfico”; por el contrario, han garantizado una “alarmante impunidad”, denunció la Comisión Mexicana de Defensa y Promoción de Derechos Humanos (CMDPDH).
En el lanzamiento de su campaña “No olvidamos”, que pretende sensibilizar sobre la grave situación de desapariciones en el país, la organización civil resaltó que, pese a que el Registro Nacional de Personas Extraviadas o Desaparecidas (RNPED)l tiene más de 28 mil 161 personas enlistadas, “existen únicamente seis sentencias en el ámbito federal por la comisión de desaparición forzada”.
En un comunicado, puntualizó que “ante la grave crisis de derechos humanos que atraviesa México, se hace necesario visibilizar la situación, así como denunciar la impunidad estructural que hace posible que estas violaciones continúen”.
La organización recordó que, pese a que a partir de la “guerra contra el narcotráfico la desaparición forzada de personas ha resurgido con una fuerza estremecedora”, en México este delito de lesa humanidad “ha existido como estrategia recurrente de terrorismo de Estado”, desde las décadas de los 60, 70 y 80, “en el periodo que conocemos como Guerra Sucia”.
Mientras en décadas pasadas, destacó, las desapariciones forzadas “se cometían por motivos políticos, hoy en día se traduce en un ataque contra la población civil, por autoridades y organizaciones criminales”.
De acuerdo con los casos documentados por la sociedad civil, abundó, “hoy, personas sin militancia social o política están siendo víctimas de desaparición forzada. Las causas y las razones no son claras, ninguna autoridad ha podido dar una explicación, más allá de discursos negacionistas o estigmatizantes de las víctimas”.
La CMDPDH alertó que “lo que sí garantizan las autoridades es la alarmante impunidad”, debido a que no existen investigaciones “encaminadas a lograr verdad y la reparación integral a las víctimas”.
Más grave aún, agregó, es que “el no reconocimiento oficial del contexto generalizado de la desaparición forzada, impide que las instituciones puedan hacer frente y cumplir con sus obligaciones en materia de justicia”.
Para la CMDPDH urge “instrumentar una política de justicia de transición de hechos violatorios de derechos humanos, así como un sistema nacional de búsqueda de personas desaparecidas”, como los familiares de las víctimas lo exigen.
Campaña “No Olvidamos”
Ante esta situación, la CMDPDH anunció el inició de la campaña “No Olvidamos”, apoyada financieramente por la Unión Europea, que pretende “informar a la sociedad sobre los alcances y consecuencias del fenómeno de la desaparición en México, dimensionando la realidad que muchos no han querido ver: su impunidad sistemática”.
Tendrá una duración de tres meses e incluirá la difusión de ocho historias de víctimas de desaparición forzada, ocurridas en contextos distintos en los estados de Guerrero, Chihuahua, Michoacán, Veracruz, Tamaulipas y Morelos.
La lista inicia con el caso de Rosendo Radilla Pacheco, detenido por militares en Atoyac en 1974, caso litigado por la CMDPDH ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CoIDH).
Siguen las historias del militar Miguel Orlando Muñoz Guzmán y de Silvia Arce, madre de tres niños, desaparecidos en 1993 y 1998 respectivamente, ambos en Ciudad Juárez, Chihuahua. También se mencionan las historias del policía federal Luis Ángel León Rodríguez y el trabajador de Conafe Daniel Ramos Alfaro desaparecidos en Michoacán en 2009 y 2013, respectivamente.
Los casos paradigmáticos contemplados en la campaña incluyen también a Óscar Reyes Ruz, trabajador desaparecido en 2012 en Veracruz, así como el de Jorge Antonio Parral Rabadán, funcionario federal desaparecido y ejecutado por militares en 2010, en Tamaulipas, y el de Jethro Ramssés Sánchez Santana, ingeniero y maestro desaparecido, torturado y ejecutado por militares en 2011 en Morelos.
Un elemento que distingue a estos casos, además del activismo de los familiares en su búsqueda de verdad y justicia, es “la impunidad, la cerrazón de las autoridades y la simulación por las instituciones encargadas de la búsqueda de personas y la investigación de los responsables”.
La estrategia de comunicación de la CMDPDH considera también un concurso fotográfico, en alianza con la Agencia Cuartoscuro “que tiene como objeto rendir un homenaje a miles de víctimas de desaparición de nuestro país, explorando la ausencia como forma de lucha”.
FUENTE: PROCESO.
AUTOR: GLORIA LETICIA DÍAZ.
LINK: http://www.proceso.com.mx/445964/mexico-garantia-de-alarmante-impunidad-en-desapariciones-forzadas-cmdpdh