Como “un verdadero robo a la nación” define José Luis Luege, exdirector general de la Comisión Nacional del Agua, un “regalo” que el gobierno de Enrique Peña Nieto planea dar a la organización Antorcha Campesina: dos millones de metros cuadrados de terrenos federales para la construcción de un parque industrial, aledaños a lo que será el Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México. La historia suena ya conocida, como en el caso de San Salvador Atenco en 2006: Un intento de despojo a los propietarios de tierras y una plusvalía que se irá a los cielos cuando se construya la terminal aérea.
CIUDAD DE MÉXICO: Una nueva historia de corrupción del gobierno de Enrique Peña Nieto está en curso: El “regalo” de dos millones de metros cuadrados de terrenos federales a la organización priista Antorcha Campesina para construir un parque industrial vecino al Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (NAICM), la mayor obra del sexenio, un plan instrumentado por el subsecretario de Gobernación Luis Miranda Nava.
“¡Esto es un verdadero robo a la nación!”, define José Luis Luege, exdirector general de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), sobre la construcción del parque industrial en Chimalhuacán, Estado de México, un proyecto que, en 2011, a él le presentó el propio Miranda Nava, secretario de Gobierno del entones gobernador Peña Nieto.
Era el último año del sexenio de Peña como gobernador y Miranda Nava le pidió a Luege una cita para, junto con el entonces alcalde antorchista de Chimalhuacán, Jesús Tolentino Román Bojórquez, y varios arquitectos, obtener su aval para construir un parque industrial en terrenos conocidos como Los Tlateles.
“El proyecto, para hacerlo sencillo, era la continuación de la urbanización de Chimalhuacán: Prolongar las mismas avenidas hacia la zona federal y urbanizar para el parque industrial parte de Los Tlateles, aparentemente las 200 hectáreas”, recuerda Luege, quien afirma que él rechazó el proyecto.
“Me insistieron mucho y yo les decía que ese proyecto no era viable”, recuerda Luege, quien les dijo a los miembros del grupo que era un área natural protegida destinada al parque estatal “Gerardo Cruickshank García”, según lo publicado por el gobernador Arturo Montiel en la Gaceta oficial del Estado de México, el 4 de julio de 2001.
–¿Y qué argumentaban para defender el proyecto?
–Generar empleos. Siempre ha sido su argumento: que la gente de esa zona está pobre y que la economía está muy deprimida, y que este plan era una forma de generar empleos. Yo les dije: Se pueden generar empleos de otra forma.
Por eso la contrapropuesta de Luege fue que, en lugar de un parque industrial, se creara conjuntamente un parque ecológico en el vaso del exlago de Texcoco, que generaría empleos en la zona de Chimalhuacán.
Fragmento de la entrevista que se publica en la edición 2075 de la revista Proceso, ya en circulación.
FUENTE: PROCESO.
AUTOR: ÁLVARO DELGADO.
LINK: http://www.proceso.com.mx/450084/en-proyecto-gigantesco-despojo-en-tierras-contiguas-al-aeropuerto