En países como Argentina, donde se inició con la práctica en el 2010, se encuentran pozos “cerrados” frente a espacios públicos como calles, carreteras, escuelas y otros edificios, sin advertencia alguna sobre el riesgo que implican los químicos que se utilizaron en ellos.
En México son 924 pozos los que se perforaron mediante el fracking en yacimientos tradicionales, con el fin de estimular la producción en ellos a través de nitrógeno y otros químicos, explicó Manuel Llano, de la asociación CartoCrítica, durante la presentación del informe “Última frontera, políticas públicas y resistencia al fracking en América Latina”, elaborado por la Alianza Latinoamericana frente al Fracking.
El chileno editor, Felipe Gutiérrez, explicó que la duración de los pozos es de tres años y que después de ese tiempo se abandonan, y que las consecuencias sociales de la práctica es el desplazamiento de los pueblos para sumar sus tierras a la generación de capital.
Por otra parte, Claudia Campero, de la Alianza Mexicana contra el Fracking, indicó que municipios como Xilitla, en San Luis Potosí, y Cuetzalan, en Puebla, se declararon territorios libres de fracking tras movimientos de resistencia.
El informe advierte que en los países pioneros en el desarrollo del fracking, como son Estados Unidos, Canadá e Inglaterra, “existe sobrada evidencia de los impactos severos de esta técnica en la salud de las personas y el ambiente”, y que el suelo y las aguas superficiales y subterráneas son las más afectadas por las emisiones de metano, que además contribuyen al cambio climático.
FUENTE: DESINFORMÉMONOS.
AUTOR: REDACCIÓN.
LINK: https://desinformemonos.org/fracking-se-expande-por-america-latina-y-deja-a-su-paso-devastacion-de-comunidades/