“Empezó a circular un mensaje donde decían que habían secuestrado a una estudiante afuera de las instalaciones de la escuela y se entró en pánico”, narró una joven de la Universidad del Valle de México (UVM) campus Lomas Verdes. Semanas antes, otra alumna que manejaba su automóvil por la zona también fue privada de su libertad. Días después, cuatro sujetos asaltaron una tienda departamental a pocos metros de la entrada del plantel.
“No es la primera vez que se genera un ambiente de inseguridad por el que se tengan que hacer mesas redondas. Hace cuatro o cinco años, cuando la entrada a la universidad era en la calle de al lado, había robos, secuestro exprés y extorsiones. Es una situación que se está repitiendo a pesar de que tienen experiencias previas”, destacó Moisés, un estudiante que conversó con SinEmbargo. “No tienen las capacidades de reacción. La Directora de Operaciones prometió resolver el problema, pero mientras tanto, pidieron seguir yendo y pagando las colegiaturas para que las becas no se afecten”.
Moisés sabe sobre el caso de una persona a quien asaltaron hace un mes en el puente peatonal que cruza hacia la universidad. En la primera semana de septiembre a otro de sus compañeros, quien viajaba por la noche en su coche en la esquina del campus, lo amenazaron con una pistola y le quitaron sus pertenencias.
Rodrigo, otro alumno del campus, ha estudiado durante casi cuatro años en la universidad, tiempo en que lo han asaltado cinco veces. En dos ocasiones, contó vía Facebook, en el transporte que toma para trasladarse hacia Avenida Periférico y tres veces durante el trayecto hacia su casa. A una alumna de Diseño la asaltaron junto con su amiga en Lomas Verdes hace dos semanas…
El mismo miércoles 12 de octubre en que la estudiante de noveno semestre fue secuestrada a unos pasos de la UVM, el gobierno mexiquense lanzó horas antes un programa de seguridad en el cual desplegó más de tres mil elementos del Ejército, la Marina y Policía Federal en Ecatepec, Nezahualcóyotl, Tlalnepantla, Naucalpan, Tultitlán, Chalco, Tecámac y Chimalhuacán, los ocho municipios con mayor incidencia de delitos.
De enero a septiembre, en el Estado de México se han registrado 47 mil 260 robos; 2 mil 025 homicidios y 188 secuestros. Naucalpan tiene el reporte de más de 2 mil mujeres desaparecidas en 18 meses y los recientes feminicidios de Karen Esquivel y Adriana Hernández.
Este lunes, la UVM hizo “un llamado urgente” al Comisionado de Seguridad, Renato Sales; al Gobernador del Estado de México, Eruviel Ávila Villegas; y al Presidente Municipal de Naucalpan, Edgar Olvera Higuera, para que incrementen las medidas de seguridad en la entidad, una de las que concentra los mayores delitos a nivel nacional.
“En los últimos meses, los miembros de esta comunidad universitaria han sido víctimas de diferentes tipos de delitos; somos testigos de una preocupación seria sobre la seguridad en sus viviendas, vías de comunicación y otros espacios de negocio y convivencia”, publicó la escuela en un desplegado en la prensa.
El 27 de octubre, publicó en Twitter el panista Olvera, hubo una reunión con autoridades de la UVM “para explicar acciones de seguridad en conjunto y salvaguardar el bienestar de su comunidad”.
En entrevista con Radio Fórmula, declaró que recibió “uno de los 50 municipios con mayor índice de criminalidad y de incidencia delictiva”, por lo que han tomado medidas en materia de infraestructura y servicios públicos.
“Se firmó el Mando Único y se hizo la base de operaciones mixtas con el Ejército porque 2 mil 600 elementos de seguridad pública no pueden cuidar más de un millón de almas en el municipio de Naucalpan”, afirmó el Alcalde.
Edmundo Padilla, de la asociación civil Moviendo Naucalpan, afirmó que el ambiente de inseguridad se debe a “la falta de capacidad” del actual comisario, quien realiza “actos de corrupción” a través de las cuotas y no tiene un plan integral.
El gobierno municipal culpa al estatal y federal a pesar de que la ley sostiene que la seguridad también es su responsabilidad, añadió.
SinEmbargo solicitó una entrevista con el Rector de la UVM o con la Rectora del campus Lomas Verdes, pero el área de comunicación dijo que se encontraban “supervisando” un proceso de acreditación ante la Federación de Instituciones Mexicanas Particulares de Educación Superior (FIMPES).
De acuerdo con Moisés, todos los directivos les han solicitado ser cuidadosos al hablar con la prensa para “no dañar” la imagen de la UVM. Ha visto medios de comunicación llegar al plantel con cámaras, pero “por órdenes de la Rectora” impiden su entrada.
“Es irónico que salga este desplegado exigiendo la seguridad. Ya vieron que están sumamente rebasados. Trataron de hacer lo mejor que pudieron. Llamaron policías y dieron un curso sobre qué hacer ante un asalto”, dijo.
El encargado de comunicación de la institución académica envió a este sitio la postura de la institución, la cual también ha compartido a alumnos que han comentado su preocupación en la página de Facebook del plantel campus Lomas Verdes.
Aunque la UVM ha adoptado “medidas preventivas” y ha sostenido reuniones con autoridades locales para pedir mayor seguridad, el comunicado resalta que la responsabilidad del campus en materia de seguridad “se limita a sus instalaciones y el perímetro alrededor de ellas”, ya que la seguridad de todos los ciudadanos es obligación “de las autoridades”.
“ME LLEGARON A TOCAR BALAZOS”
El viernes 14 de octubre, dos días después del secuestro de una de sus alumnas, UVM campus Lomas Verdes organizó una reunión, a la cual no acudió la Rectora Graciela Romero Cambrón. De acuerdo con Moisés y otra estudiante, no se obtuvieron soluciones durante el encuentro.
“Fue la Directora de operaciones, el Administrador del campus y el Director de seguridad privada. Ante la mala organización, los padres de familia de otras escuelas lograron entrar y fueron a reclamar al policía del Estado de México que asistió. Traía su discurso ya hecho y repetitivo. Pero cuando le preguntaron sobre solucionar el problema, no dio ninguna respuesta”, afirmó Moisés.
“No se llegó a nada porque muchos papás daban testimonio de lo que pasaba, pero la escuela se limitaba a decir que no podían hacer nada y que [el Gobernador] Eruviel no les hacía caso”, añadió otra alumna en entrevista.
Ese viernes, la UVM Lomas Verdes informó a la comunidad universitaria que contrató a dos elementos de la Dirección General de Seguridad Ciudadana y Tránsito Municipal de Naucalpan para vigilar la periferia del campus durante todo el día de lunes a sábado; y una patrulla de vigilancia privada realiza rondines.
Además, expuso, cuentan con el apoyo de elementos de seguridad del municipio, incluyendo recorridos del Comisionado de la Secretaría de Seguridad municipal. Ahora todos los alumnos están obligados a ingresar al Campus con su credencial.
No obstante, los estudiantes manifestaron su desacuerdo con las medidas y una alumna exigió que se aplique en todos los campus de la UVM.
“La última clase debería terminar a las 8 o 9 de la noche a más tardar. Salir a las 10 es exponer a su comunidad. A mí me llegaron a tocar balazos afuera y asaltos a las 10, y no estaba tan terrible la situación. Piensen que no sólo es salir y ya. Es el trayecto a sus casas también”, escribió una usuario de Facebook. “Cómo es posible que teniendo el potencial de adquisición no alumbren donde está el estacionamiento viejo. La mayoría de sus estudiantes deambulan ahí y sería excelente ayuda que mantuvieran alumbrado toda esa calle desde la Av. Lomas Verdes”, expuso otra.
La madre de una alumna pidió brindar transporte de bajo costo “al menos dentro de las colonias de la zona. La policía de Naucalpan es más corrupta que los mismos maleantes”, dijo.
El 18 de octubre se llevó a cabo una segunda reunión en el auditorio del campus. Aunque esa vez se contó con la asistencia de la Rectora, ambos estudiantes contaron que se limitó a decir que “no era su culpa” lo que sucedía afuera del plantel y que tenía que acordar con los dueños porque ella no administraba el dinero.
A raíz de ese encuentro, se contrataron diez elementos más de seguridad privada y tres patrullas. No obstante, Moisés cuestionó que los retenes son “muy aleatorios”, que los elementos del Ejército y de la Comisión Estatal de Seguridad solo “están media hora y se van”, y los policías municipales solo están parados platicando.
EXIGEN TRANSPORTE ESCOLAR
Una estudiante del plantel fue quien propuso poner transporte escolar por diversas rutas. El administrador aceptó “después de bastante presión”, sin embargo el servicio no se ofrecerá por la noche y no será gratuito.
“Se propuso que salieran camiones de la universidad por diversas rutas para no ir solos y porque hay grupos que tienen clases hasta las 10 de la noche, hora en que ya no pasa el transporte público. Se dio respuesta hasta la semana pasada, pero solo lo pondrán para los que entran a las siete de la mañana y para los que salen máximo a las cuatro de la tarde. Están buscando una forma fácil de deslindarse del problema”, declaró una estudiante del campus.
A partir del primero de noviembre comenzará el servicio en diferentes rutas y se ofrecerá 50 por ciento de descuento.
Aunque la mayoría aplaudió el anuncio, una usuario destacó: “Falta el horario de la tarde”.
FUENTE: SIN EMBARGO.
AUTOR: DULCE OLVERA.
LINK: http://www.sinembargo.mx/31-10-2016/3109921