Los ciudadanos volvieron a tomar las calles para oponerse al incremento en el precio de los combustibles. Desde varios puntos de Ciudad de México cientos de personas marcharon hasta converger en el Zócalo. Aunque en menos proporción que en las movilizaciones de la víspera, alrededor de 500 inconformes se congregaron en la Plaza de la Constitución para demandar al Ejecutivo federal y al Congreso dar marcha atrás al impuesto especial sobre productos y servicios (IEPS), el cual genera el alza a gasolinas y diésel.
Alumnos del Instituto Politécnico Nacional (IPN) y de las universidades Nacional Autónoma de México (UNAM) y Autónoma Metropolitana (UAM) se manifestaron frente a Palacio Nacional, donde anunciaron que este jueves se reunirán en la UAM-Azcapotzalco para formar un frente amplio estudiantil contra el gasolinazo y las reformas estructurales. Asimismo, llamaron a la sociedad para que este lunes se sume a la manifestación que se realizará a las 16 horas del Ángel de la Independencia al Zócalo, la cual fue convocada a través de redes sociales.
La CNTE a escena
En tanto, la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) rechazó el incremento en el precio de los combustibles y acordó que su militancia se sumará a las movilizaciones populares en contra de esa medida ‘‘de la reforma energética’’. En un pronunciamiento repudió ‘‘el trato y la salida que el gobierno pretende dar a este conflicto social infiltrando a sus agentes y promoviendo el caos y saqueo de tiendas comerciales para justificar una represión masiva y selectiva’’.
A su vez, la dirigencia de El Barzón consideró que en la reunión de la Conferencia Nacional de Gobernadores (Conago) con el secretario de Hacienda y Crédito Público, José Antonio Meade, programada para este lunes, los mandatarios estatales deben presentar un programa de austeridad del gasto suntuario, que incluya a sus gabinetes y a los partidos políticos, además de exigir un sistema de rendición de cuentas y castigo a la corrupción.
En una carta dirigida al presidente de la Conago –y gobernador de Morelos–, Graco Ramírez, los barzonistas consideraron que a dicho encuentro también se debe convocar a la Procuraduría General de la República y a la Auditoría Superior de la Federación para que evalúen los procesos en contra de varios ex gobernadores.
En el contexto de las protestas efectuadas ayer, Andrea Sánchez, académica de Trabajo Social de la UNAM, indicó que en la pasada década el aumento a la gasolina fue de 137 por ciento. ‘‘En 2006, al inicio del sexenio de Felipe Calderón, el precio era de seis pesos 74 centavos.
‘‘Al final de su administración, en diciembre de 2012, pagábamos por litro 10 pesos 81 centavos. Ahora, con Enrique Peña Nieto, nos vuelven a engañar, ya que en 2015 se dijo que no iba a subir el precio del combustible, pero fue mentira. En enero de este año ya se pagan 16 pesos por litro (de Magna), es decir, en lo que va del actual sexenio hay un incremento de 47.91 por ciento.’’
Previamente, varios motociclistas se trasladaron del Monumento a la Revolución al Zócalo para exigir la eliminación del IEPS. En caravana y a bordo de sus motocicletas llegaron hasta Diagonal 20 de Noviembre, donde estacionaron sus vehículos y posteriormente siguieron a pie hasta la Plaza de la Constitución.
Asimismo, unas 50 personas marcharon del Ángel al Zócalo. En ese contexto, Nieves Gallardo, vecina (desempleada) de la colonia Ticomán, de 50 años de edad, afirmó que el alza en los combustibles afectará los productos de la canasta básica. ‘‘Ya ahorita la tortilla subió a 14 pesos, y lo que viene. Se anunció también un incremento en el transporte público’’. Por su parte, la señora González, de Tacuba, criticó esta medida y llamó a la ciudadanía a movilizarse de una vez por todas.
Colectivos pertenecientes a la agrupación Somos Más se manifestaron en contra del gasolinazo a las afueras de la Torre de Pemex, ubicada en avenida Marina Nacional. Allí aseguraron que el alza a los combustibles, la electricidad y el gas generará un ‘‘efecto devastador en la economía de los que menos tienen’’, y advirtieron que al tener menos poder adquisitivo la población disminuirá su consumo, lo que afectará severamente a las industrias.
Dijeron además que ‘‘el gobierno está detrás de las manifestaciones violentas y de los saqueos’’ a centros comerciales y tiendas de autoservicio, mientras diversos automovilistas que pasaban por el lugar apoyaban la protesta haciendo sonar sus bocinas.
Fuente: La Jornada
Autores: César Arellano, Emir Olivares, Matilde Pérez y Carolina Gómez Mena (reporteros)
http://www.jornada.unam.mx/2017/01/09/politica/004n1pol