Ángel Ruiz Méndez, campesino Zapoteco de los valles centrales de Oaxaca. Heredó la tierra donde han sembrado por generaciones la flor de gallo, el cilantro, el perejil, el tomate, la cebolla, los rábanos que llenan los mercados locales, en especial, el mercado de Ocotlán los días viernes de cada semana.
Ángel recuerda que en el año de 1980 llovió abundantemente, se llenaron todos los pozos de agua, en los canales corría bastante agua. La lluvia de ese año aseguró el riego de las hortalizas. Entre suspiro y anhelo el compañero menciona “aquellos tiempos”. Pues fue la última vez que llovió de esa manera.
En aquel entonces Ángel tenía 10 años, estaba aprendiendo a relacionarse con la tierra. Hoy, a sus 47 años todo ha cambiado. Menciona, justo donde estoy parado pasaba un canal de agua, claramente recuerdo que en ella había ranas, peces, mi papá decía que había camarones.
Después de la lluvia de 1980, las lluvias empezaron a escasear. En 1985 la sequía era muy fuerte. En 1990 los pozos estaban secos, los campesinos escarbaban 25 metros para sacar agua y regar las hortalizas. Esa época fue muy difícil. Al ver y vivir esa problemática, Ángel decidió migrar a los Estados Unidos en busca de un mejor futuro.
“El trabajo allá es difícil, los patrones mandan mucho y trabajas mucho. Por eso me regrese, no me gustaba que me trataran mal”.
¿Cuándo regresaste, qué pasó?
Cuando llegue a mi pueblo, a Santiago Apóstol, la tierra estaba muy enferma. Ya no corría agua. Las formas de trabajar eran diferentes, la verdad yo me preocupe mucho. Creo que la culpa lo tiene ese famoso neo-liberalismo que ha facilitado el riego con motores, el arado con tractores, pero nos ha quitado la conciencia y la relación de cuidado con el agua. A mí me tocó regar con cantaros, así regábamos nuestras hortalizas.
En el año 2005 se vivió la mayor sequía en los valles centrales de Oaxaca. En ese mismo año la Comisión Nacional del Agua (CONAGUA) envió “cartas invitación” a los agricultores de los distritos de Ocotlán y Zimatlán, para que pagaran el consumo excedente de agua utilizada. Fue un momento de incertidumbre y de asombro para las comunidades zapotecas.
¿Cuánto tenían que pagar por el agua que usaban para sus hortalizas?
En algunos casos, les cobraban a los campesinos 24 mil pesos por el uso del agua en el campo. Variaba, 2 mil, 6 mil, 14 mil…
¿Después qué hicieron?
Nos enteramos que nuestra agua tenía dueño y nosotros no sabíamos. Esa situación hizo que nos organizáramos para enfrentar el problema y solucionarlo. Llevamos 11 años luchando. Nos hemos enterado de muchas cosas, nos hemos caído y vuelto a levantar. Supimos que en nuestras comunidades existe un decreto de veda impuesto por el Presidente de la República en los años de 1967. Ese decreto nos impide a nosotros los campesinos tener acceso libre al agua para nuestras parcelas.
Estamos luchando 16 pueblos que estamos integrados en la Coordinadora de Pueblos Unidos por el Cuidado y la Defensa del Agua. Buscamos levantar el decreto de veda en las 16 comunidades que denominamos “micro región Xnizaa (nuestra agua)”. Para que seamos nosotros los campesinos quienes administremos y cuidemos el agua. El gobierno no tiene interés en los campesinos, nunca la ha tenido.
Nosotros somos los olvidados pero les recordamos con nuestra lucha que somos personas y que nuestro trabajo es importante. Somos los que mandamos hortalizas a la ciudad.
Don Ángel, cuénteme un poco más, ¿por qué lucha?
Porque quiero que mis hijos no sufran. Porque me he dado cuenta que el gobierno nos ha quitado nuestros derechos y hay que recuperarlo. Porque CONAGUA nos dice que a partir de los pozos irregulares se está perdiendo el agua y que si seguimos sacando agua provocaríamos prejuicios en la economía del país. Pero sabemos que no somos nosotros, sabemos que el gobierno nos quiere desaparecer, porque si realmente le importará el agua o la vida campesina, ya hubiera hecho programas para restaurar los mantos acuíferos, no lo hace. Hemos sido nosotros.
¿Qué es lo que han hecho para restaurar el agua?
Hemos construido retenes, ollas y pozos de absorción y recuperado el nivel del agua en los últimos diez años. Hemos emprendido pláticas en las comunidades para concientizar el uso del agua y promover su cuidado.
Entonces el gobierno, ¿qué ha hecho?
El gobierno no ha hecho nada para ayudarnos, sólo nos quiere cobrar. Para nosotros es clara la posición del gobierno, está con los empresarios. Le ha dado concesiones a empresas mineras para la explotación, hay minas en fase de explotación en nuestra región, la de San José El Progreso, y ellos, acaso no gastan agua. Hay embotelladoras de refrescos en la región. Ellos son los que están gastando agua. Por eso luchamos, para que se respete la vida campesina y que seamos nosotros quienes cuidemos y administremos el agua.
La COPUDA (Coordinadora de Pueblos Unidos por el Cuidado y la Defensa del Agua) está actualmente en el proceso de una consulta indígena, en la etapa consultiva, el pasado 8 de febrero le entregó a la CONAGUA su propuesta para el uso y cuidado del agua.
Once años de lucha de la Coordinadora Don Ángel
Si, los compañeros y compañeras estamos cansados, pero sabemos que tenemos que seguir, esto es así, la vida en el campo es una lucha constante, por un lado con el gobierno, por el otro lado la sequía, por otro lado los malos precios de nuestros productos que en ocasiones los tenemos que regalar.
Ángel Ruiz Méndez es actualmente el presidente de la Coordinadora de Pueblos Unidos por el Cuidado y la Defensa del Agua de 16 comunidades Zapotecas de los valles centrales de Oaxaca.
FUENTE: DESINFORMÉMONOS.
AUTOR: DIEGO SAYDEL GARCÍA.
LINK: https://desinformemonos.org/comunidades-zapotecas-los-valles-centrales-oaxaca-se-organizan-degender-agua/