La FGE informó a través de su cuenta oficial de Twitter que alrededor de las 8:00 horas peritos de la División Científica de la Policía Federal, de la Procuraduría General de la República (PGR) y de la Universidad Autónoma del Estado de Morelos (UAEM) arribaron al lugar para llevar a cabo realizar dicho procedimiento, en el que también participarán organizaciones civiles, la comisión nacional y estatal de Derechos Humanos, así como notarios públicos que darán fe de las labores.
El Fiscal general del estado, Javier Pérez Durón, detalló que presumiblemente hay 35 cuerpos en las fosas, mismos que, preven, serán desenterrados en aproximadamente una semana, y a los que se les tomarán muestras de ADN, las cuales serán cotejadas con las bases de datos de familiares de personas desaparecidas.
Al termino de estos análisis, los restos serán reinhumados en las gavetas que se encuentran ubicadas dentro del panteón Jardines del Recuerdo, en el municipio de Cuautla.
En el cementerio, ubicado la colonia Pedro Amaro, se aislaron las áreas de trabajo, e instalaron diversas carpas, así como un módulo en el cual se tomarán muestras genéticas a familiares de las víctimas.
A mediados del año pasado, las autoridades del estado informaron que se llevaría a cabo la exhumación de la fosa, donde fueron inhumados decenas de cuerpos en el 2014, de acuerdo con datos de la Fiscalía de Morelos.
El caso guarda similitudes con el de las dos fosas de Tetelcingo, también en Morelos, en las que se depositaron 119 cuerpos de manera clandestina en 2014, los cuales fueron exhumados el año pasado.
Las carpetas de investigación -que hoy han sido cifradas por el Fiscal general como 35 pero que la FGE había concretado en 25 hace unos meses- “tampoco están bien documentadas” por diversos casos de negligencia, consideró el poeta y activista.
En principio, las labores de exhumación, que seguirán un protocolo similar al del Tetelcingo, durarán cinco días, señala Sicilia, quien matiza que este periodo podría extenderse si lo que se encuentra en la fosa no coincide con lo registrado en las carpetas de investigación.
El activista expresó su deseo de que “el proceso sea conforme a derecho”, ya que muchos familiares de víctimas “tienen la esperanza de encontrar a sus seres queridos allí”.
Lamentó que no se esté realizando una investigación adecuada sobre las inhumaciones, en las que solo “dos personas están siendo responsabilizadas” y son funcionarios de “bajo nivel”.
“Los responsables fundamentales, el Gobernador Graco Ramírez y el ex Procurador (Rodrigo) Dorantes, no están siendo investigados, no han sido llamados a cuentas, y eso es grave”, argumentó.
Un informe publicado en agosto pasado por el programa de atención a víctimas de la UAEM puso de relieve que el hallazgo de las fosas clandestinas de Tetelcingo destapó no solo graves irregularidades cometidas por las autoridades, sino una modalidad de “desaparición”.
Entre los cuerpos recuperados en Tetelcingo por el momento se han identificado seis de personas que estaban registradas como desaparecidas.
FUENTE: SIN EMBARGO.
AUTOR: REDACCIÓN.
LINK: http://www.sinembargo.mx/21-03-2017/3177875