CUERNAVACA, Mor: El gobierno del estado obstaculiza los trabajos de exhumación de las fosas clandestinas de Jojutla, pues ya no hay espacio suficiente donde reinhumar los cuerpos que faltan por exhumar, sostuvieron familiares de desaparecidos y urgieron al Ejecutivo a concluir las gavetas necesarias para colocar los cadáveres restantes.
Amalia Hernández, tía de Oliver Wenceslao, comerciante de Cuautla secuestrado, asesinado y luego inhumado clandestinamente en las fosas de Tetelcingo, informó que el gobierno de Graco Ramírez debe apurar el trabajo de construcción, porque no sólo están los cuerpos que todavía faltan de las fosas de Jojutla, sino además, aquellos que se “llenan” las cámaras frigoríficas de los servicios periciales del estado.
En conferencia de prensa en la ofrenda a las víctimas, instalada en los arcos de Palacio de Gobierno en Cuernavaca, hizo cuentas: “el año pasado se construyeron 250 gavetas, de Tetelcingo se exhumaron 117 cuerpos; en Jojutla supuestamente serían 35, pero ya van 85, y contando”.
Por ello, este lunes entregaron un documento al Ejecutivo para que informe cuántos son los cuerpos que se encuentran en calidad de “desconocidos” en las cámaras frigoríficas de los servicios periciales, para así tener un cálculo certero del número de gavetas que se necesitan para albergar todos los cadáveres que sean exhumados.
A ello hay que sumar el hecho de que, según un testimonio recogido en exclusiva por Apro, en el lugar donde se encuentra la fosa de Jojutla existen al menos otras dos, donde se habrían inhumado 19 cuerpos y 70 bolsas, cuya cantidad de cadáveres es difícil de precisar, pues en los sacos podría haber más de uno.
Amalia Hernández estuvo acompañada de su hermana María Concepción, madre de Oliver Wenceslao, así como de Javier Sicilia, fundador del Movimiento por la Paz con Justicia y Dignidad, y miembros de las organizaciones que conforman el Frente Amplio Morelense, como el vocero de la Coordinadora Morelense de Movimientos Ciudadanos, Gerardo Becerra.
Las víctimas informaron que el pasado viernes se realizó una reunión en la Secretaría de Gobernación (Segob) en la que se decidió una ruta de trabajo para continuar los trabajos en las fosas de Jojutla. Para ello, las propias víctimas realizarán una labor de convencimiento con las familias de las personas inhumadas, lo que ha detenido los trabajos desde abril pasado.
En la conferencia de prensa también participó el vicario de la Diócesis de Cuernavaca, Luis Millán, quien confirmó que el próximo 8 de junio, el obispo Ramón Castro y Castro, ofrecerá una misa en el panteón de la colonia Pedro Amaro, donde se encuentran las fosas de Jojutla, como “una forma de ofrecer consuelo y ánimo en la lucha de las familias en la búsqueda de sus seres queridos desaparecidos”.
Durante tres semanas –del 21 de marzo al 27 de abril–, equipos forenses de la Procuraduría General de la República (PGR), de la Policía Federal (PF), de la Fiscalía local y de la Universidad Autónoma del Estado de Morelos (UAEM) realizaron el trabajo de exhumación y toma de muestras para identificar alrededor de 85 cuerpos.
Entre el 23 de mayo y el 3 de junio de 2016, los mismos equipos exhumaron 117 cuerpos de las fosas clandestinas de la Fiscalía del gobierno de Graco Ramírez, ubicadas en el poblado de Tetelcingo, municipio de Cuautla, Morelos.
Del proceso de identificación, hasta el momento han sido entregados seis cuerpos, los cuales fueron buscados durante varios años por sus familiares sin saber que la Fiscalía los inhumó de manera clandestina.
Lo que ocurre en Jojutla ahora es consecuencia de esa primera exhumación. Las irregularidades en Tetelcingo y Jojutla confirman que la práctica de la Fiscalía de Morelos de inhumar en condiciones irregulares –“criminales”, diría Sicilia– es “una práctica sistemática” que debería considerarse “como un crimen de lesa humanidad”, concluyó.
FUENTE: PROCESO.
AUTOR: JAIME LUIS BRITO.
LINK: http://www.proceso.com.mx/488796/graco-obstaculiza-exhumaciones-en-jojutla-acusan-familiares-desaparecidos