Ciudad de México. El Instituto Murillo en el estado de México debe pagar los gastos médicos y psicológicos, así como devolver las cuotas de inscripción y colegiaturas a la madre de un menor que sufrió lesiones en la cabeza, frente, pómulos y espalda en diversos incidentes durante el tiempo de clases en el plantel.
A propuesta de la ministra Norma Lucía Piña Hernández, la sala le dio la razón a la madre, quien argumentó que la institución incurrió en negligencia, omisión e incumplimiento del servicio educativo.
Los ministros determinaron que las instituciones educativas y a su personal, “les resulta exigible diligencia profesional, en vista del interés superior del niño y el derecho a su protección integral, mediante la observancia de los estándares cimentados en la dignidad, integridad, educación y no discriminación”.
FUENTE: LA JORNADA
AUTOR: JESÚS ARANDA