La epidemia de obesidad, sobrepeso y diabetes declarada por el Presidente de la República Mexicana en noviembre de 2016, no se ha atacado efectivamente debido a que “las políticas públicas no han funcionado justamente porque están secuestradas por los intereses [de las empresas de productos ultraprocesados y bebidas azucaradas]”, denunció la organización El Poder del Consumidor.
La organización El Poder del Consumidor (EPC) hizo un llamado a la Secretaría de Salud a llevar a cabo los compromisos acordados en la mesa de trabajo “Obesidad en niños y adolescentes” dentro del proceso de Gobierno Abierto, principalmente, señaló Alejandro Calvillo, director de la ONG, “la línea de acción referida al conflicto de interés en la política pública frente a la obesidad”.
El pasado 23 de mayo, a 5 años de la implementación de la Alianza para el Gobierno Abierto (AGA), un acuerdo de apoyo entre organizaciones y el Gobierno federal, los 10 grupos que conformaban el núcleo civil para el desarrollo de las políticas gubernamentales tomaron la decisión de retirarse, esto luego de que en febrero se destaparan prácticas de espionaje contra miembros de la sociedad civil que apoyaban en las mesas de diálogo sobre salud, sin que hasta el momento exista posicionamiento al respecto por parte de la administración de Enrique Peña Nieto.
El activista Calvillo -una de las víctimas de espionaje ilegal- llamó a la Secretaría de Salud a evitar el conflicto de interés en el desarrollo e implementación de las políticas públicas dirigidas al combate de la obesidad en la población mexicana.
Calvillo informó que la organización que dirige envió una carta al doctor Eduardo Jaramillo, de la SSa, para expresar que se encuentra en la “mejor disposición” de trabajar con las autoridades para sacar adelante los compromisos establecidos en Gobierno Abierto.
Asimismo, subrayó que la epidemia de obesidad, sobrepeso y diabetes declarada por el Presidente de la República Mexicana en noviembre de 2016, no se ha atacado efectivamente debido a que “las políticas públicas no han funcionado justamente porque están secuestradas por los intereses [de las empresas de productos ultraprocesados y bebidas azucaradas]”.
“La mejor vacuna contra esta epidemia de obesidad y diabetes transmitida por el vector corporativo, la mejor vacuna son los anticuerpos contra el conflicto de interés. Si no tenemos estructuras firmes y transparentes que eviten el conflicto de interés, no vamos a tener una política efectiva que ponga un límite y pueda volver atrás esta emergencia epidemiológica”, agregó.
El activista acusó que desde la declaratoria de emergencia por dichas enfermedades, las autoridades no han generado una política efectiva para combatir dichas enfermedades y, por el contrario, han trabajado de la mano con las empresas para favorecer sus intereses, por ejemplo, con un etiquetado frontal “incomprensible”.
FUENTE: SIN EMBARGO.
AUTOR: IVETTE LIRA.
LINK: http://www.sinembargo.mx/07-06-2017/3235159