Integrante de la Comisión de Hacienda en San Lázaro, Vidal Llerenas desglosó los datos del Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF): en 2014 se reportó un costo de 104 mil 396 millones, y luego en el primer informe del año pasado esto cambió a 180 mil 122 millones, 75 mil millones más. Así se siguió reportando hasta el PEF 2017, donde se indicó que el presupuesto sería de 107 mil 800 millones, y en los informes trimestrales, también de 2017, tenemos que el último costo es de 186 mil millones de pesos. ¡Es un enredo de cifras!
Lo que es seguro, dijo, es que este año no se gastarán 5 mil millones de pesos. Entrevistado sobre el particular se le inquirió en torno a la diferencia reportada en el PEF y las que se hallan en los informes trimestrales:
“Uno pensaría que tiene que ver con la inversión que no va a ser financiada en el presupuesto, sino con bursatilización de las obras del aeropuerto, del orden de 75 mil millones de pesos. Alrededor de 105 mil millones serán financiados con el presupuesto, y 80 mil con bonos. Ahora sí hay un incremento de seis mil millones de pesos respecto al presupuesto del año pasado.
Llama la atención que el fideicomiso tiene 61 mil millones de pesos, que ya están fideicomitidos al aeropuerto, es decir en estos años (2014, 2015, 2016) más que ejercer los recursos, la autoridad ha ahorrado para la ampliación; es decir, se han guardado 61 mil millones de pesos en el fideicomiso y se han ejercido alrededor de 22 mil millones de pesos. Y esto va a costar, aparentemente como 186 mil millones. Tenemos una terminal aérea que cada vez nos cuesta más, y en lugar de ejercer recursos estamos guardando el dinero. Aquí, hay claramente un bajo ejercicio de gasto en la parte presupuestal.
-Es recorte, subejercicio, ¿qué significa para el avance de la obra?
-Es evidente que esta habiendo un menor ritmo en el gasto programado en el aeropuerto. Se está gastando menos, son cinco mil millones, que sí es algo, y lo que se ha hecho en estos años es generar un fideicomiso en lugar de avanzar en la obra, por eso tienen 61 mil millones de pesos guardados. Es una opacidad parcial, si se puede decir. La ASF ha señalado estos problemas en su fiscalización porque es difícil saber el avance de la obra en estos momentos.
Esto tiene que ver con el origen, porque hay distintas fuentes de financiamiento, está la bursatilización de los derechos del aeropuerto, que entiendo son estos 80 y tantos mil millones, está la parte presupuestal (una parte la hace la Secretaría de Comunicaciones y la otra la Comisión Nacional del Agua), y ahí debieron haber establecido mecanismos para garantizar mas transparencia. Así es complicado el seguimiento de cómo va la obra. Yo creo que sí hay, de manera deliberada, un intento de no reconocer rezago, que ha habido problemas en la construcción del aeropuerto.
FUENTE: LA JORNADA
AUTOR: ROBERTO GARDUÑO
LINK: http://www.jornada.unam.mx/2017/08/06/politica/009n1pol