En entrevista para Aristegui Noticias, el líder del organismo cúpula empresarial señaló que se hará un esfuerzo “para evitar una contaminación política” de las negociaciones del acuerdo comercial.
Recordó que en 2018 habrá elecciones presidenciales en nuestro país, así como legislativas en Estados Unidos, por lo que el objetivo es concluir lo antes posible la modernización del tratado.
Castañón precisó que en Washington, donde este miércoles 16 de agosto arrancó la primera ronda de la renegociación, se encuentran 150 empresarios de diversas cámaras y sectores, para defender sus intereses, en el marco de estas pláticas.
Desde la capital de Estados Unidos, el presidente del CCE reconoció que uno de los sectores que preocupan en la renegociación es el automotriz, luego de lo dicho por el representante comercial de la Casa Blanca, Robert Lighthizer.
Incluso, no descartó como una hipótesis que se pretenda imponer un arancel del 2.5 por ciento a las exportaciones automotrices de México a la Unión Americana; sin embargo, aclaró que ese sería el peor de los escenarios y que durante las negociaciones se buscará una salida benéfica para los tres países.
Respecto al tema del déficit comercial que ha denunciado la administración de Donald Trump como uno de los efectos negativos del TLCAN, Juan Pablo Castañón señaló que éste es producto del paso de una economía manufacturera a una robotizada en el vecino del norte.
Para reducir ese déficit, sugirió que México realice transferencias tecnológicas a su propia industria.
Castañón aplaudió la defensa que ha hecho el gobierno mexicano del Capítulo 19 del Tratado sobre la solución de controversias y señaló que “de ninguna manera” se debe permitir que desaparezca, como lo ha propuesto el gobierno estadounidense.
Por último, el presidente del CCE resumió así las posturas presentadas por los tres países al inicio de la renegociación: Canadá está abierto al diálogo y ve estas pláticas como una oportunidad para modernizar el acuerdo; México dejó en claro que le apuesta al libre comercio, “pero no a cualquier costo“; mientras que Estados Unidos ve como principal preocupación el déficit comercial.
Ante ello, concluyó que se debe encontrar una solución que beneficie a las tres naciones, “que no sólo sea para reducir el déficit comercial de Estados Unidos, a través de la limitación del comercio”.
FUENTE: ARISTEGUI NOTICIAS.
AUTOR: ISAÍAS ROBLES.
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