Ciudad de México. Al encabezar la reunión de evaluación sobre los estados afectados por los sismo el presidente Enrique Peña Nieto dio a conocer un primer balance sobre le costo de las afectaciones: 13 mil millones de pesos en daños en escuelas, 6 mil 500 millones de pesos en viviendas de Oaxaca y Chiapas; 10 mil millones, cifra preliminar, para los inmuebles en Ciudad de México, Morelos, Puebla y el estado de México, así como 8 mil millones en patrimonio cultural. Esto es un total preliminar de 37 mil 500 millones.
Durante la reunión el mandatario dio a conocer un esquema de monederos electrónicos que se ha comenzado a instrumentar como mecanismo de apoyo a los estados de Chiapas y Oaxaca para dirigir específicamente las partidas y garantizar que lleguen a las familias damnificadas. Precisó que acceder a estos monederos implica previamente haber sido censado por las autoridades e incorporado por el padrón de damnificados.
Señaló que los avances en Chiapas y Oaxaca han permitido ya ubicar claramente la dimensión del costo de las viviendas que asciende a 6 mil 500 millones de pesos. Insistió en que se buscarán esquemas para proporcionarles materiales de construcción y asesoramiento técnico a efecto de la que las familias afectadas participen en la reconstrucción de sus viviendas.
Al referirse al sismo del 19 de septiembre, el mandatario mencionó que aún cuando el censo no ha sido concluido en la Ciudad de México, Morelos, Puebla y el estado de México, donde afectó el sismo, una valoración preliminar estima que hay un total de 10 mil millones de pesos en afectaciones.
Precisó que al igual que lo ocurrido en Chiapas y Oaxaca se instrumentará un mecanismo de monederos, si bien el caso de la Ciudad de México es particular en virtud del costo del suelo y otros factores inmobiliarios, por lo que, adelantó, en coordinación con el gobierno de la Ciudad de México buscará esquemas de financiamiento a tasas preferenciales.
Peña Nieto señaló que confía en que hacia el final del año se tenga ya encaminada el proceso de reconstrucción, pues se tiene clara ya una hoja de ruta y esquemas de colaboración entre los gobiernos federal, estatales y municipales que aseguren los apoyos a las personas damnificadas.
FUENTE: LA JORNADA
AUTOR: ALONSO URRUTIA