Los propietarios del edificio que se colapsó con el sismo del 19S, y donde murieron 49 personas, aseguran que el inmueble cayó por "una causa natural" y no por irregularidades en la construcción, que han sido señaladas por autoridades.
Luego de las declaraciones del titular de la Consejería Jurídica y de Servicios Legales del Gobierno de la CDMX, Manuel Granados, quien anunció la expropiación del predio de Álvaro Obregón 286 por supuestos “adeudos con la administración local”, los dueños de la propiedad se defienden al asegurar que el inmueble nunca ha presentado deudas y que el colapso no se debió a anomalías en la construcción, sino a causas meramente “naturales”.
No sólo eso. El asesor legal de los dueños del edificio, en el que fallecieron 49 personas tras colapsarse con el terremoto del pasado 19 de septiembre, aseguró que hasta el momento las autoridades capitalinas no se han acercado a ellos para hablar de los planes para expropiar el terreno y crear un memorial por las víctimas del sismo.
“Nosotros consideramos que el colapso del inmueble se debió a una causa natural… consideramos que también fuimos víctimas del sismo, no victimarios de ninguna manera”, dijo José Luis Carrasco, asesor legal de la Inmobiliaria Álvaro Obregón S.A de C.V, dueña del inmueble.
En entrevista con Animal Político, Carrasco aseguró que evalúan “ejercer acciones legales en contra de las personas que de manera irresponsable han generado ideas erróneas, incluso entre los propios deudos de las víctimas, que no corresponden a la realidad y hacen parecer que los propietarios (del inmueble), quienes acataron la normatividad, ahora parecerían victimarios”.
Además, explicó que desde su construcción, en 1959, el edificio no sufrió cambios que pudieran afectar su estructura. Sobre las versiones periodísticas que señalan que el edificio no contaba con muros de carga, aseguró que por la técnica de construcción el inmueble no ocupaba esos muros.
“De tal manera que si no había muro de carga es porque no había y porque no lo requería”, dijo.
Niegan anomalías
Durante las labores de rescate del edificio de Álvaro Obregón, Humberto Morgan, coordinador de asesores de la Secretaría de Movilidad del Gobierno de la CDMX y quien fungía como enlace de las autoridades capitalinas con las familias de las víctimas que se encontraban en el lugar del siniestro, declaró que los rescatistas perdieron horas vitales debido a que el edificio presentaba irregularidades en la construcción.
“Se hicieron dos cosas terribles, primero subir a una altura prácticamente de 6 pisos que probablemente con unas condiciones que cambiaron en la ley de obra de 1985 hubiese resistido, y segundo por alguna cosa que no entendemos se hizo un procedimiento a partir del tercer, cuarto, quinto y sexto piso, de una losa que se llama catalana…que tiene un espesor de 70 centímetros cuando una losa normal pudiera ser 10, 12, 14 centímetros”, aseguró el funcionario en esa ocasión.
Al respecto, Carrasco sostuvo que las declaraciones del funcionario son imprecisas y no corresponden a la realidad, pues el inmueble se colapsó con los mismos pisos que fue construido. “No tenía ningún elemento (piso) adicional, ni diferencias de grosor entre pisos… Tenemos la documentación que señala que desde ese entonces se aprobó y construyó un inmueble de seis niveles”, agregó el asesor legal, quien ofreció copias
Dueños del edificio entre los sobrevivientes
De acuerdo con un contrato de arriendo de una de las empresas que se encontraba en el edificio de Álvaro Obregón 286, en poder de Animal Político, la Inmobiliaria Álvaro Obregón S.A de C.V, propiedad del arquitecto Ernesto Sota López, es la legítima propietaria del inmueble. Sota y su padre, Ernesto Sota Cisneros, tenían sus oficinas en el sexto piso del edificio y el día del sismo se encontraban en el lugar.
Padre e hijo fueron rescatados 24 horas después del colapso del inmueble. A decir del asesor legal de la inmobiliaria, José Luis Carrasco, los dos se encuentren en etapa de recuperación y ninguno reporta lesiones graves. En el caso de Sota López, éste se ha reunido con algunos de los arrendatarios del edificio.
“Esto ha sido muy reciente, tras su salida del hospital, y hemos tratado de buscar de qué manera podemos coadyuvar con ellos, insistiendo en que no es responsabilidad nuestra (el colapso)…dado que fue una causa natural”.
-¿Han tenido acercamiento con la Procuraduría de Justicia de la Ciudad de México o el Gobierno capitalino para ofrecer su versión?-
“Por parte de la Procuraduría sí porque fue asegurado el inmueble, el Ministerio Público (MP) lo aseguró evidentemente para que no se metieran personas extrañas y con motivo de ello acudimos al MP a recuperar los archivos (del inmueble)… Por parte del Gobierno de la Ciudad de México no hemos tenido ningún acercamiento, no hemos tenido ningún contacto con ellos”.
-¿Qué les dice la procuraduría, los están investigando?-
“Sabemos que hay una investigación por el colapso del inmueble por motivo de un hecho. Hemos sido llamados en calidad de testigos, para aportar los elementos que acrediten la propiedad. Este miércoles se presentará uno de los representantes legales para acreditar la propiedad, pero no es una investigación en contra, hasta donde tenemos conocimiento, sino como coadyuvantes para aportar los elementos que hagan saber el motivo del colapso”.
-¿El pasado domingo el Gobierno de CDMX anunció que van a expropiar el terreno para hacer un memorial. Les han notificado esa decisión?-
“Tuvimos noticia de un comunicado del señor Granados, donde se anuncia la expropiación del inmueble basado en la existencia de anomalías, que hemos constatado que no es correcto; y por la existencia de supuestos adeudos de contribuciones, lo que también es absolutamente incorrecto… Por eso la postura firme de los propietarios de que no pueden ser mencionados como causas de expropiación”.
“Este martes salió también una nota en el periódico Reforma donde se cita a un ingeniero del Colegio Ingenieros que señala que no contábamos con constancias de verificaciones estructurales periódicas porque eran obligatorias… Son obligatorias sólo para cuestiones donde se tiene como objetivo asuntos públicos: escuelas, centros de reunión, instalaciones deportivas, ferias, etc, pero jamás para una oficina…De tal suerte que la mención de una supuesta anomalía es incorrecta”.
¿Legalmente qué harán ustedes?-
“No hemos sido notificados. Conforme a la ley de expropiaciones, debemos ser notificados, porque estamos visibles estamos ubicados. Pese a que la oficina estaba allí, el domicilio fiscal está en otra ubicación y es del conocimiento de la autoridad, de tal manera cuando seamos notificados iniciaremos la incorporación al procedimiento que establece la ley. Seremos muy cuidadosos en la protección de los derechos de los propietarios para que no pase por encima de sus derechos, porque consideramos que el gobierno no tiene facultades para la expropiación”.
-¿Qué tipo de acciones legales van a aprender contra las personas que hablaron de irregularidades?-
“Lo que estamos buscando es evaluar si existe la posibilidad de hacerlo, porque no toda mención en contra de una persona genera daño. Un daño conforme a la legislación debe ser muy claro, evidente y contundente, para generar un derecho de reclamo.”
-¿Les ha dicho algo la Procuraduría sobre sus investigaciones?-
“La Procuraduría se ha abocado a recabar información de las causas del colapso. Entendemos que se están haciendo estudios y peritajes, donde seguramente se deberá observar el tema de la antigüedad misma del edificio y el resentimiento después de tantos años y otros sismos que ha vivido”.
FUENTE: ANIMAL POLÍTICO.
AUTOR: FRANCISCO SANDOVAL ALARCÓN.
LINK: http://www.animalpolitico.com/2017/11/irregularidades-alvaro-obregon-286/