El 18 de septiembre pasado, Alfredo del Mazo Maza, quien tres días antes asumió como nuevo Gobernador del Partido Revolucionario Institucional (PRI) en el Estado de México, afirmó en una entrevista que le bastarían tres meses para obtener resultados y reducir daños en materia de seguridad. Sin embargo, el plazo se venció y la entidad no cambió de rumbo, por el contrario los crímenes han aumentado y ahora se dan con más saña.
Sobre este resultado, analistas y especialistas en seguridad consultados por SinEmbargo encuentran que la responsabilidad no es sólo del mandatario local, y de quien lo antecedió en el cargo, sino también del Presidente Enrique Peña Nieto, y la estrategia que ha mantenido a lo largo de sus ya más de cinco años al frente del Gobierno federal.
“Yo creo que es una responsabilidad compartida. Los gobernadores son los primeros responsables de acuerdo con la legislación en materia de seguridad y hay una compartición con el Gobierno federal; en ese estado, gobernado por el PRI –que hoy tiene a uno de los suyos a la cabeza del Gobierno federal–, todos ellos son responsables”, dijo Edgar Cortez Moralez, investigador del Instituto Mexicano de Derechos Humanos y Democracia, AC (IMDHD).
Peña Nieto gobernó el Estado de México hasta el 15 de septiembre de 2011, cuando le sucedió un político de su mismo partido Eruviel Ávila Villegas, quien además fue Presidente Municipal de Ecatepec por dos periodos: de 2003 a 2006 y de 2009 a 2011. Ese municipio –el segundo más poblado del país, sólo detrás de Iztapalapa en la Ciudad de México– es considerado “la capital del feminicidio” en el país.
Desde 2013, las cifras de inseguridad en el país han ido aumento y el Estado de México superó en sólo cinco años del Gobierno federal de Enrique Peña Nieto el número de carpetas registradas por homicidio doloso en todo el Gobierno federal anterior, mismo que presidió el panista Felipe Calderón Hinojosa.
La Fiscalía General de Justicia del Estado de México reportó de 2007 a 2012 un total de 8 mil 528 carpetas por homicidio doloso, en tanto que en casi cinco años, de 2012 a noviembre de 2017, suman 9 mil 909.
Esa crisis obligó a Del Mazo Maza pronunciarse sobre sus planes de seguridad en una entrevista en Radio Fórmula, tres días después de haber asumido en el cargo.
“Haremos del Estado de México uno de los estados más seguros. En los primeros tres meses de Gobierno tendremos resultados concretos sobre seguridad”, dijo entonces el hoy Gobernador mexiquense.Pero la tendencia de violencia no se ha revertido.
De acuerdo con las cifras del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SNSP), septiembre pasado terminó con 173 homicidios dolosos, octubre con 189 y noviembre con 172.
Alejandro Corzo Tellez, investigador del Observatorio Nacional Ciudadano (ONC), descartó que el cambio de titular en el Gobierno estatal –el pasado 15 de septiembre– haya detonado la violencia en esa entidad gobernada desde hace ocho décadas por priistas.
“No fue el cambio. Las tendencias vienen de muchos meses atrás. Esa entidad lleva años dando señales de alerta”, dijo Corzo.EL DAÑO POR LA CORRUPCIÓN
El Estado de México es la entidad que reportó el mayor número de eventos de corrupción del país, de acuerdo con una medición del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), con 62 mil 160 por cada 100 mil habitantes mayores de 18 años que tuvieron contacto con alguna autoridad.
“Las policías combaten la delincuencia en el momento que ocurre o, en el mejor de los casos, la previenen. Pero si vemos el primer momento en el que las organizaciones deciden dónde operar, eso requiere de instituciones que se lo permitan. Las organizaciones criminales funcionan donde hay gobiernos corruptos”, dijo Vidal Romero León, investigador del Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM).
Organizaciones sociales como el Semáforo Delictivo han señalado que delitos como el robo de vehículos reflejan la colusión de delincuentes con autoridades.
En noviembre pasado, la entidad alcanzó el mayor número de carpetas de investigación por este delito en su historia: 2 mil 712, además el robo con violencia también rompió récord, con 6 mil 463 carpetas.
“No es culpa de la policía, no es que por sí mismo sean corruptos, es que tenemos un monstruo en la sala que no queremos desarticular. Esto es responsabilidad del Gobierno Federal, y del Poder Legislativo, es urgente legislar sobre la necesidad de una reforma policial”, dijo Santiago Roel, director general de Semaforo Delictivo.
En mayo de 2016, 118 de los 125 municipios de la entidad firmaron un acuerdo para implementar el mando único, sin los resultados esperados.
“Realmente no se nota el accionar de parte de la autoridad si consideramos que, por ejemplo, el robo con violencia mostró su máximo histórico en octubre y esto es el punto más alto de una tendencia que comenzó en julio 2016”, dijo Corzo Tellez.ESTRATEGIA DE NEGACIÓN
Pero, ¿cuál es la incidencia del crimen organizado detrás de la violencia en el Estado de México?
Aun en campaña, Del Mazo Maza evitó pronunciarse sobre la presencia de cárteles en la entidad; al tiempo que los delitos de crimen organizado corresponden ser atendidos al orden federal.
“El Edomex tiene el mismo fenómeno que la Ciudad de México. Nadie quiere reconocer que el crimen organizado se ha metido de lleno a estas entidades y que operan en total comodidad”, opinó el consultor en seguridad David Martínez-Amador.
La entidad cuenta con presencia de las células Guerreros Unidos y La Nueva Empresa derivadas del cártel La Familia Michoacana, de acuerdo con un reporte de la Procuraduría General de la República (PGR) del último octubre.
“Ejecutan dicho nivel de violencia porque no hay reparo alguno en que el Estado reaccionará. Si bien estamos hablando de grupos que se rearticulan provenientes de los grandes cárteles, estos grupos son volátiles e igualmente violentos. Edomex tuvo la experiencia del grupo ‘La mano con ojos’ cuyo líder era un ex militar y sufre de grupos provenientes de los Beltrán Leyva”, dijo Martínez Amador.Samuel Lizárraga Ontiveros, alias “El Tortillero”, quien habría sido el líder de los Beltrán Leyva en el Edomex fue detenido por la PGR el 13 de noviembre en Querétaro; su orden de captura estaba fincada en Toluca por el delito de delincuencia organizada.
El Estado de México es la entidad con mayor número de homicidios dolosos, con sólo 35 carpetas de investigación menos que las 9 mil 944 reportadas por Guerrero.
En cuanto a las desapariciones, el Edomex en la base de nombres no renglones de la organización Data Cívica un total de 3 mil 832, en tanto que en Guerrero suman mil 294 del 2007 a julio del presente año.
FEMINICIDIOS
Las autoridades mexiquenses han sido inefectivas para hacer descender los feminicidios. El 8 de diciembre el Fiscal Alejandro Gómez Sánchez detalló que hasta esa fecha hubo 59 feminicidios en la entidad, apenas siete carpetas de investigación menos reportadas en el 2016.
“Obviamente al estado no le conviene reconocer, mucho menos en la antesala de una elección presidencial el número real de feminicidios”, dijo Dulce María Ortega, de Nos Queremos Vivas Neza.
El colectivo ha identificado al menos 210 casos de feminicidio. Sin embargo, las trabas que encuentran las familias las orillan a conformarse con la catalogación de homicidio, apuntó la activista.
El 28 de julio del 2015, la Secretaría de Gobernación declaró la Alerta de Violencia de Género en 11 municipios, sin embargo, la medida no ha dado resultados por la falta de competencia de las autoridades, dijo Ortega.
“La violencia aumenta porque el Edomex es una zona periférica no sólo geográfica, sino también social”, expuso.
FUENTE: SIN EMBARGO.
AUTOR: JUAN LUIS GARCÍA HERNÁNDEZ.
LINK: http://www.sinembargo.mx/31-12-2017/3364946