El mayor crecimiento se registró en las actividades primarias, que contemplan la agricultura, ganadería y pesca, pero estas representan apenas 3% del PIB nacional. Por su parte el sector servicios, creció 3.2% en 2017. En tanto, la minería, construcción, energía eléctrica y manufacturas, decrecieron un 0.4%.
El INEGI publicó el crecimiento de la economía mexicana del cuarto trimestre de 2017. El Producto Interno Bruto (PIB) creció a un ritmo de 1.5% respecto al cuarto trimestre de 2016, y 0.8% respecto al trimestre previo. El crecimiento está muy lejos de la meta propuesta por México, ¿cómo vamos?, 4.5% anual, por lo que el #SemáforoEconómico está en naranja.
Con esta información se puede obtener también el crecimiento de todo el año, que fue 2.3% anual. Es la tasa de crecimiento más baja observada desde 2013, cuando la economía creció apenas 1.6%.
Al separar por tipo de actividad económica, el crecimiento de las actividades primarias, que contemplan la agricultura, ganadería y pesca, fue 3.3% en el año. Sin embargo, estas representan apenas 3% del PIB nacional. Por su parte, el sector servicios, que tiene un peso aproximado de 64% en el PIB, creció 3.2% en 2017. No obstante el dinamismo en estos sectores, las actividades secundarias, que incluyen minería, construcción, generación de energía eléctrica y manufacturas, decrecieron a un ritmo de 0.4% el año pasado.
El valor del PIB en 2017 fue de 18.164 billones de pesos constantes de 2013. Esto equivale a 147 mil 055 pesos en términos per cápita o por habitante. Si bien el PIB per cápita no considera ciertos factores que son fundamentales para determinar el nivel de bienestar de la población, es una variable relevante que permite, hasta cierto punto, determinar el nivel de vida de la población.
Podría parecer una diferencia poco relevante crecer 2.3% respecto a la meta de 4.5%. Sin embargo, las pequeñas diferencias en el tiempo se acumulan y tienen impactos sustanciales. Si durante los siguientes 12 años la economía mexicana creciera al mismo ritmo de 2.3% anual, y considerando una tasa de crecimiento poblacional del 1.0%, el PIB per cápita en 2030 alcanzaría el valor de 173 mil 654 pesos anuales. Esto representa una mejora de 18.1% en términos reales respecto al de 2017.
Por el contrario, si la economía mexicana creciera a partir de 2018 en al menos 4.5% anual, el PIB per cápita en el mismo periodo aumentaría en más de la mitad – en 55% – respecto al observado actualmente. El PIB per cápita tendría un valor de 228 mil 988 pesos anuales. La diferencia entre ambos escenarios en 2030 es de más de 55 mil pesos mensuales, una diferencia porcentual de 31.9%.
Crecer al 4.5% se dice fácil, pero usualmente su ejecución es más complicada de lo que parece. Existen numerosos obstáculos al crecimiento de México, pero identificarlos y proponer políticas concretas para enfrentarlos es un primer paso en la dirección correcta.
En primer lugar, se sigue teniendo un país con marcadas diferencias regionales. Mientras el norte y Bajío continúen creciendo por encima del 4.5% mientras el sur se mantiene estancado o decreciendo, no solo se seguirá teniendo un dinamismo económico nacional menor al deseado, sino que dichas brechas regionales se seguirán ampliando.
Por otra parte, la Comisión Federal de Competencia Económica (COFECE) publicó en diciembre de 2017 el documento “Plataforma para el crecimiento 2018-2024”, en el cual propone acciones concretas para mejorar la competencia y, con ello, el desempeño de la economía mexicana. De hecho, el mismo reporte recopila evidencia sobre los efectos positivos de la competencia económica. Una adecuada política de competencia incrementa el PIB entre 2% y 3% adicional.
La necesidad de más y mejor infraestructura es también un obstáculo que urge atender. La falta de conectividad influye en muchos sectores de la actividad económica, desde la distribución de bienes y servicios producidos en diferentes partes del territorio hasta el sector turismo. Finalmente, uno de los mayores pendientes es el Estado de derecho. La creación de leyes y reglas es insuficiente sin autoridades que exijan y vigilen su cumplimiento.
FUENTE: ANIMAL POLÍTICO.
AUTOR: REDACCIÓN.
LINK: https://www.animalpolitico.com/2018/03/499697/